El ambicioso plan de Mega para quedarse con el Festival de Viña

El pasado viernes 5, Mega fue el protagonista en solitario de uno de los hitos más relevantes para la industria televisiva nacional. La señal del Grupo Bethia –en unión temporal con la productora de conciertos Bizarro- fue la única que postuló al proceso de licitación para adjudicarse el Festival de Viña en el período 2025-2028, quedando con amplias posibilidades de adjudicarse el certamen.

La resolución de parte de la comisión organizadora podría llegar en las próximas semanas, con mayo como el momento más probable para anunciar si la señal privada se queda con la fiesta veraniega de la Ciudad Jardín.

Chilevisión, Canal 13 y TVN desistieron de entrar en carrera por el espectáculo. Sobre todo estas dos últimas televisoras, las que entregaron argumentos públicos que guardaron relación con motivos financieros y con cambios en las cláusulas para el contrato en este nuevo período.

“Parece desproporcionado que el concesionario deba hacerse cargo de obras estructurales de un bien público que es la Quinta Vergara, solo para hacer uso de las instalaciones durante una semana al año, que es cuando se realiza el festival”, puntualizó por ejemplo Canal 13 en un comunicado.

La queja apunta a que las bases de la presente licitación establecieron un piso mínimo de UF 137.000 para adjudicarse la transmisión del evento. El monto contempla UF 95.000 por concepto de renta de concesión y UF 42.000 adicionales para obras de desarrollo, como la remodelación y mantención de la Quinta Vergara. Este último aspecto –entre otros-no le habría parecido razonable a TVN y Canal 13 a la hora de postular.

Por su lado, Mega entregó una detallada oferta de más de 30 páginas -a la que tuvo acceso Culto- donde presenta su idea de Festival para el lapso que parte el próximo año. Entre varios puntos, apuesta por potenciar las competencias en su pantalla, convertir a los animadores en “embajadores del Festival” y darle una amplia vitrina al evento en sus respectivos espacios. Pero también hay algunos ítems donde lo ofrecido choca con la licitación municipal.

Por ejemplo, para promocionar y difundir las competencias internacional y folclórica –instancias que a veces parecen bajo la sombra de los espectáculos principales-, Megamedia comunicará las bases del concurso y el inicio de las postulaciones a través de todas las plataformas de su departamento de prensa. El matinal Mucho Gusto, por su lado, hará una activación especial para difundir las características de las competencias.

En el mismo espacio matinal, y cuando el Festival ya esté en desarrollo, participarán al menos tres finalistas para contar sus historias, sus testimonios de vida y cómo han llegado a participar de la fiesta.

Al día siguiente de los resultados de las competencias, los ganadores participarán del mismo Mucho Gusto. Muchos de estos hitos se replicarán en las vías digitales de Megamedia y en sus radios (Carolina, Infinita, Romántica y Disney).

Para potenciar el mismo Festival de Viña, Mega también garantiza “la activa participación de sus distintos rostros y talentos, con la finalidad de difundir y promocionar los eventos que involucra la realización del Festival”. Vale decir, que sus respectivos créditos en pantalla estén al servicio del certamen.

“Desde aumentar su audiencia en diferentes plataformas y proyectarlo a nivel internacional, hasta concebirlo como un certamen cuyos beneficios ayudan al desarrollo de la ciudad y sus vecinos. Campaña publicitaria que se realizará antes de cada versión del Festival en distintas etapas, entre las cuales se contemplan awareness (conocimiento), animadores, artistas, line up, venta de entradas y llamado al público a presenciar el evento”, describe la oferta.

Esta promoción también se hará a través de las diversas plataformas de Megamedia, considerando además sus partners internacionales, con pautas de alcance latinoamericano. En ese sentido, tales puntos parecen una rememoranza del “Viña del Mar sale al mundo, en alas del Festival”, el lema con que Mega tuvo el espectáculo en los 90 –cuando era Megavisión- y lo intentó amplificar para todo el continente.

El canal también asegura el posicionamiento de merchandising del Festival y de formatos en la vía pública de Santiago y Viña del Mar, para darle mayor alcance, visibilidad y penetración ciudadana.

Todos los años también se materializará un concurso ciudadano de diseño de afiches del evento, cuyas bases serán difundidas por la estación. El autor del afiche ganador obtendrá un premio de 90 UF. Se imprimirán 100 copias de la obra triunfadora para el archivo histórico del Festival y la difusión de la ciudad.

En el ítem Organización y Producción del Festival, hay un término importante: Mega pide a la Municipalidad que el anfiteatro de la Quinta Vergara se entregue a su debido tiempo y en óptimas condiciones. Además, solicita que “con la finalidad de realizar ensayos del Festival, y otros eventos a determinar por Megamedia, este último podrá utilizar el recinto de la Quinta Vergara con un mínimo de 3 veces durante cada año de concesión, previa coordinación con la Municipalidad”.

También hay otro punto vinculado a la eventual suspensión del Festival por algún factor determinado. Mega dice que “en caso que, en cualquier causa, se suspenda la realización, y/o la producción de alguna y/o de todas las jornadas del Festival, o de alguna de sus versiones, la Concesión se extenderá automáticamente por un año adicional, sin necesidad de pago extraordinario, lo cual constituye un elemento esencial de la presente oferta”.

Según reveló el medio Pura Noticia, tal párrafo choca con las bases de la licitación, que dicen que la extensión del contrato no será de forma automática por un año adicional en caso de cualquier coyuntura. “En caso de existir un aumento de plazo el concesionario y/o empresa contratada deberá ampliar la vigencia de la garantía de fiel cumplimiento del contrato por igual extensión que el aumento concedido por el mandante, al momento de firmar el instrumento respectivo”, se establece en la licitación.

Tal “letra chica” podría generar una fricción entre la oferta de Mega y la Comisión organizadora encargada de evaluar. Un tema particularmente sensible, ya que en la última licitación hubo dos años en que no hubo Festival (2021 y 2022), debido a la crisis de la pandemia del Covid-19.

Con respecto a los animadores, en el documento de Mega no hay detalles específicos, pero sí se establece que serán “talentos con vasta experiencia y reconocida trayectoria en la animación y conducción de espectáculos y eventos masivos, reconocidos por sus pares a nivel nacional”. Además, ellos se convertirán en “embajadores del festival”.

La televisora ya sondeó la posibilidad de que Karen Doggenweiler se convierta en la mitad femenina en la animación sobre la Quinta Vergara. La conductora de Mucho Gusto ya habría dicho estar disponible para el desafío. Con respecto a su contraparte masculina, aún no existe claridad, aunque también podría ser un nombre fichado desde fuera del canal, sólo para cumplir las funciones festivaleras del verano.

También, por otro lado, habrá espacio para rostros de backstage y rostros para las redes sociales.

También hay menciones para los artistas y para el humor: “En cada noche del Festival contaremos con una excelente propuesta de humor diversa y transversal, que contagie de energía a la Quinta Vergara y al mundo entero. Para ello, la búsqueda –nacional y/o internacional- estará encabezada por el alto estándar en la experiencia humorística de Megamedia”.

También se garantiza la presencia de una orquesta y de números de obertura en cada noche.

Por otro lado, se asegura que al minuto de contratar artistas y distribuirlos en cada velada, se evitarán “brechas generacionales”, bajo el propósito de que cada día viñamarino fluya en forma armónica.

¿Y qué pasa con la gira internacional de promoción del Festival de Viña? También fue uno de los puntos en discordia antes de la licitación ya cerrada. Para muchos actores de la industria televisiva, no se justificaba viajar con animadores y con personeros municipales a distintas latitudes con el propósito de difundir la cita. Para muchos, el evento “no ganaba nada” con aquello.

Mega incluye el ítem y dice que tiene como fin “atraer a artistas internacionales para participar en el certamen”. La idea es que participen los animadores junto a representantes de la Municipalidad, en diversas ciudades y eventos. “Con todo, la Gira correspondiente al año 2024 se efectuará una vez realizada las respectivas elecciones municipales”, remata.

La oferta de Mega además considera la realización de la Gala o Noche cero, la que no se llevó a cabo este año debido a los incendios que golpearon Viña del Mar a principios de febrero, a sólo un mes del evento. “Se va a mantener y potenciar la Gala del Festival, con su respectivo espectáculo televisivo y la creación de un evento que fomente el Festival”, dice.

Pero hay otro aspecto que también podría generar un gallito entre la Municipalidad y Mega. Respecto de la posibilidad de la Municipalidad de poner término anticipado al contrato “cuando así lo aconsejen las necesidades de la institución o cuando incurran situaciones de caso fortuito o fuerza mayor” las bases estipulan que se debe dar aviso por escrito al concesionario “con una anticipación de 10 días corridos a que se produzca el término del contrato” y que “esta decisión no dará derecho a ningún tipo de indemnización”.

Sin embargo, Mega no aceptó esto último y en su propuesta estableció que, en ese caso que se termine el contrato de forma anticipada, la obligación de la Municipalidad es devolver proporcionalmente la renta pagada y además que se le pague una indemnización como una condición clave para hacerse cargo del Festival.

“Esta decisión de la Municipalidad dará derecho al concesionario a obtener la devolución del monto de la renta de concesión en proporción al plazo faltante por ejecutar en el Contrato, respecto del cual está poniendo término anticipado y además a ser indemnizado en un monto equivalente al valor de la Garantía de Fiel Cumplimiento del Contrato, esto es en un valor equivalente a un 5% del valor Total de la Renta de la Concesión más todos los perjuicios que efectivamente puedan ser probados. Este derecho del Oferente a ser indemnizado en los términos señalados constituye un elemento de la esencia de la presente oferta y principal motivo que la ha llevado a contratar, en términos tales que la oferta, en todas sus partes, está condicionada a la aceptación de este mecanismo de compensación e indemnización”, dice el canal.

¿Otro punto a considerar? Mega pide que el canal de YouTube de la Municipalidad de la Ciudad Jardín no suba los shows del evento sino hasta seis meses después de terminada cada presentación. El hecho se contrapone a lo sucedido en las últimas versiones, cuando el canal oficial del Festival sube casi en la misma noche las presentaciones respectivas de cada artista, alojándolas y dejándolas disponibles para todo tipo de audiencia.

“En consecuencia, la Municipalidad no se encuentra autorizada para ejercer o utilizar los derechos de VOD y SVOD referidos, debiendo, en todo caso, abstenerse de subir y transmitir las ya señaladas interpretaciones en su Canal Oficial de YouTube, salvo autorización expresa”, establece Mega en su apuesta.

Eso sí, Mega asegura que designará partners internacionales para que transmitan en vivo y en directo, y de forma íntegra, el Festival, uno de los tramos claves de la licitación.

Como extra, y como parte de la tradición festivalera, la empresa de Vicuña Mackenna también se compromete a la emisión de un programa vespertino como previa a las jornadas festivaleras, un espacio satélite con invitados nacionales e internacionales. También se apoyarán los eventos que durante el año copan Viña del Mar, como la celebración del 18 de septiembre, el Festival Internacional de Cine Viña, el Día del Patrimonio y el Año nuevo en la ciudad, entre otros.

La oferta de Mega para alcanzar el evento fue de UF 95.017 por concepto de renta, más las consabidas UF 42.000 adicionales para obras de desarrollo de la Quinta Vergara.