Aunque debutó en el cine hace una década, fue Los asesinos de la Luna (2023), de Martin Scorsese, la película que le concedió un reconocimiento transversal a Lily Gladstone. La actriz de origen nativo americano estremeció con su interpretación de Mollie Kyle, la mujer que pierde a su familia y cercanos a manos de la conspiración que orquestan hombres blancos y adinerados en contra de la Nación Osage durante los años 20.
No ganar el Oscar para ella fue lo de menos. La industria reconoció que había concedido una de las mejores actuaciones de 2023 y Gladstone se mostró satisfecha con que su labor pudiera contribuir a que otros intérpretes y realizadores indígenas expandan sus oportunidades en Hollywood. Una meta que espera seguir alcanzando con sus dos primeros estrenos de 2024.
En Fancy Dance: Una danza ceremonial, de la directora debutante Erica Tremblay, da vida a Jax, una joven que quedó al cuidado de su sobrina después de la desaparición de su hermana. Con la urgencia de la realización de una asamblea al interior de la comunidad, ambas se mueven desde una reserva en Oklahoma hasta la carretera con el fin de dar con el paradero de la madre de la niña.
“Jax es definitivamente imperfecta, pero es absolutamente un producto de su entorno y ella hace lo que sea necesario para mantener a su familia en marcha, especialmente en un mundo que no está diseñado para ella (para que tenga éxito)”, explicó recientemente.
Estrenada en el Festival de Sundance 2023, la cinta ha sido alabada por su capacidad de observación y el poderío de sus actuaciones, las que conceden Gladstone e Isabel DeRoy-Olson, quien encarna a la sobrina de la protagonista. Tras llegar a Apple TV+ (misma compañía que respaldó el último largometraje de Scorsese), podría alcanzar una audiencia más amplia.
La protagonista de Los asesinos de la Luna se mostró algo más reticente a aceptar su otro estreno de este año: Bajo el puente: La verdadera historia del asesinato de Reena Virk, una miniserie de ocho capítulos que se adentra en las circunstancias que llevaron a la desaparición y asesinato de una joven en 1997 en Canadá.
Una de sus principales dudas residía en que le ofrecían interpretar a una policía indígena, un tipo de personaje que, según su análisis, se reitera demasiado en Hollywood. La otra razón es más amplia: realizar una serie basada en un caso criminal que ya ha sido abordado en otros proyectos siempre supone una cuota de riesgo.
Sin embargo, Gladstone cambió de opinión en la medida que profundizó en la historia junto a su creador y concluyó que prevalecería cierto tacto al momento de aproximarse al caso de Reena Virk, la hija de inmigrantes indios que fue asesinada por otros adolescentes hace 27 años.
Así, se convenció de encarnar a Cam Bentland, una hija adoptiva de una familia de policías que está al centro de la trama. En medio de la investigación se reencuentra con Rebecca (Riley Keough), una escritora que también quiere indagar en qué ocurrió con Virk. Aunque su personaje es totalmente ficticio, le permitió ingresar en otros temas que le generaban interés.
“Pensé que era una construcción brillante tener un policía adoptado de las Primeras Naciones, que siente una obligación con Reena de una manera que se vuelve cada vez más clara para ella”, indicó a The New York Times. Su actuación, que podría reportarle su primera candidatura a los Emmy, se podrá ver en Latinoamérica a partir del 10 de julio, día en que la miniserie arribará a la plataforma Disney+.
Según sus palabras, también busca cintas “sólidas y divertidas que no necesariamente tengan que ver con una identidad, sino que solo con una historia”. Hoy traza nuevos planes en sintonía con esa definición. Uno de de sus siguientes títulos será una comedia en que compartirá con Kelly Marie Tran, Bowen Yang y Youn Yuh-jung (The wedding banquet). Otro será un drama llamado The memory police en que será dirigida por Reed Morano. Su futuro es más que prometedor y no quiere tocar una sola tecla.