La minería es un mundo de supersticiones. Quizá la más antigua es aquella que sugiere que ninguna mujer debería ingresar al yacimiento, por temor a que se produzca un derrumbe, un colapso o alguna tragedia de ese calibre.
En Río Turbio, una pequeña ciudad argentina ubicada a unos 30 kilómetros de Puerto Natales, esa creencia también estaba extendida entre sus habitantes. Allí los hombres de la mina sólo sentían simpatía por una mujer: Santa Bárbara, la patrona de los mineros, a quien recordaban sagradamente cada 4 de diciembre.
“En el Río Turbio de mi infancia ninguna soñaba con ser minera, ni jefa de la empresa”, relató la escritora argentina Erika Halvorsen en 2019. La también dramaturga conocía de cerca esa dinámica patriarcal porque creció en esa comunidad de la Patagonia y, a través de un texto publicado por Anfibia, se propuso rescatar a “la verdadera soberana de mineros y mineras”: Carla Antonella Rodríguez.
Conocida como “Carlita” por sus cercanos y colegas, se convirtió en 2011 en la primera mujer trans en unirse al yacimiento, desafiando las estructuras que sostenían el lugar desde hace décadas. Cuando algunos osaron con intimidarla ella los amenazó con ventilar sus secretos con sus familias y cuando la reasignaron a labores administrativas luchó para volver a la mina. Finalmente consiguió su objetivo.
Conmovida por esa capacidad para vencer toda adversidad, Halvorsen decidió escribir un guión de cine a partir de las vivencias de Rodríguez. El proyecto, titulado Miss Carbón, acaba de ser dirigido por la realizadora argentina Agustina Macri y cuenta con Lux Pascal en el rol principal. La sinopsis de la cinta la describe como “una historia de superación sobre la pasión y esos sueños que no entienden de géneros”.
“Representar la vida de una sobreviviente fue una experiencia increíblemente desafiante“, asegura Pascal a Culto. “Es mi primer protagónico en un largometraje y estoy muy orgullosa de que sea esta historia la que me tocó interpretar. La épica vida de la primera mujer minera de la Patagonia”, apunta.
“La valentía que tuvo Carlita para cumplir su sueño de ser minera y mujer es algo que me atravesó desde el día en que leí el guion por primera vez. Con su fuerza y su espíritu, es un ejemplo de que soñando, se puede, y de que todavía hay mucho terreno por conquistar como mujeres y mujeres trans. Pero ella, en ese sentido, trae esperanza”, planteó en un comunicado Macri, quien debutó en la dirección con Soledad (2018). En tanto, la productora española Merry Colomer la definió como una historia “llena de verdad, de luz, y de mujeres valientes”.
El rodaje de la película –una coproducción hispano-argentina producida por Morena Films, con participación de Movistar+ y Filmin– acaba de concluir tras seis semanas de trabajo en España (en dos provincias del País Vasco) y en Río Turbio. Allí Lux Pascal compartió con un elenco que también componen el actor español Paco León (La casa de las flores) y las argentinas Laura Grandinetti y Romina Escobar.
La actriz chilena –quien hace un año egresó de Julliard– ha tenido un activo 2024, estrenando y filmando proyectos. A inicios de año, en el Festival de Sundance, debutó Bust, un cortometraje que Angal Field le ofreció realizar en la época en que aún era estudiante del prestigioso conservatorio de Nueva York. En el certamen estuvo junto a su hermano Pedro Pascal, a quien ella acompañó en la última entrega de los Emmy, realizada en enero pasado.
Luego colaboró con la directora Alicia Scherson en el rodaje de Guerra de verano, la adaptación cinematográfica de El Tercer Reich (2010), la novela póstuma de Roberto Bolaño. Grabada entre Uruguay y Chile, la cinta también cuenta con Aline Küppenheim, el actor canadiense Dan Beirne (Priscilla) y los argentinos Agustín Pardella (La sociedad de la nieve) y Malena Sánchez (El encargado). Entre ese largometraje y Miss Carbón es probable que Pascal esté en la pantalla grande con al menos dos películas durante 2025, si es que no agrega otra producción a su agenda.
Sigue leyendo en Culto
