*Ghost - Rite here rite now (original motion picture soundtrack)
A pesar de la resistencia de la vieja guardia aficionada al metal -sienten que es una especie de tomadura de pelo exportada por Suecia-, Ghost sigue renovando audiencias saltándose la clásica vía de acceso con el papá iniciador de sus vástagos en Maiden y Metallica, utilizando más melodía y estribillo que riff, junto a una imaginería más gótica que luciferina, aún cuando Satanás ocupa un espacio central en su narrativa. Para ejecutar el plan, reviven el formato disco-en-vivo, que en los años 70 podía cambiar el curso hacia el éxito, como sucedió con Kiss y Cheap Trick.
Esta es la banda sonora de un film concentrado en el remate de la gira Re-Imperatour de 2023, el registro de dos fechas en el Kia forum en Los Ángeles, en septiembre del año pasado. Esto es Ghost en su mejor momento como espectáculo y en un formato de mini orquesta contando coristas, teclados, piano, cello y percusión, el mismo número presentado en el Movistar Arena un par de semanas después de este registro. El setlist privilegia Impera (2022) y Meliora (2015), sus mejores álbumes, en un gran fondo de influencias heavy y shock rock. Probablemente seguirán frunciendo el ceño en fans con edad de examen prostático anual. Pero a los jóvenes y seguidores menos prejuiciados, simplemente encanta.
*Fármacos - Cuarto
No deja de ser una paradoja que el mejor corte de este cuarto álbum de Fármacos -Once-, rehuye los tópicos dominantes en las restantes canciones, ancladas en la carnalidad apasionada, combustible central en la obra de Diego Ridolfi, alma y rostro de este proyecto nacional radicado en México. Producido entre el músico y Cristián Heyne -tándem habitual en Fármacos-, Cuarto reincide en la puntillosidad del sonido y las texturas, configurando ambientes etéreos y vaporosos, el cuadrante hacia un dream pop personalizado, sin enlaces obvios. La impronta de Gustavo Cerati, siempre omnipresente en el trabajo de Ridolfi, no desaparece del todo pero se diluye en formas menos explícitas. Cuarto también persiste en los logros de Manual de una pérdida (2021), el consistente título anterior, en tanto algunas canciones son propicias para una estación radial imaginaria, especializada en música romántica con desvíos indie bailables, como ocurre en Que nunca pare.
Eventualmente se extrañan algunas variables en el compartimento vocal, algo arrellanado en la sugerencia sin mayores alternativas, con Ridolfi encarando estribillos como un seductor que avanza mientras habla al oído, con destino a la intimidad total. Si se trata de enmarcar el sexo, falta un clímax.
*Blur - Live at Wembley stadium
Las últimas señales de Blur apuntan a un receso indefinido, salvo que un llamado de último minuto y el consiguiente cheque les hagan cambiar de parecer como sucedió con Coachella este año, tras anunciar su despedida de los escenarios en Fauna Primavera Chile, en noviembre último. Si este contundente álbum en vivo más el reciente documental To the end encarnan un eventual adiós, el gesto es a la altura de una de las grandes bandas británicas de los últimos 30 años. Incluye la totalidad del setlist presentado en los masivos conciertos en Wembley el 8 y 9 de julio de 2023; 26 canciones que reflejan la dinámica estilística del cuarteto -lejos los más avezados del Britopop-, una paleta donde conviven con singularidad y naturalidad pop rock, alt rock, soft rock, y el musical con pinceladas de vodevil. El paso por el estadio londinense irradia la química de músicos que privilegian el goce de tocar juntos, antes que el rigor de rendir selecciones de su discografía al pie de la letra, ambiente coronado por la complicidad del público.
Otras cuatro canciones de shows en distintas ciudades de Inglaterra -tres de ellas con mejor sonido que todo el resto del material-, complementan un registro en directo definitivo de la grandeza de Blur.