Durante años la desaparición de Jorge Matute Johns copó los noticieros, matinales y programas de crónica roja. Una cobertura televisiva en que circularon diversas tesis y pistas falsas, y una galería de voces compuesta por policías, jueces, abogados, testigos y el círculo más íntimo del joven que, en el momento en que se le perdió el rastro, en noviembre de 1999, tenía 23 años y cursaba último año de Ingeniería Forestal en la Universidad de Concepción.
Luego, con el hallazgo de sus restos, en febrero de 2004, y con la sucesión de vuelcos de la causa en la justicia, las preguntas sobre lo que ocurrió durante aquella fatídica noche en que asistió a la discoteca La Cucaracha sólo se multiplicaron.
No hay otro enigma policial tan comentado y enrevesado en la historia del país durante el último cuarto de ciclo. Sin embargo, el acercamiento de la ficción nacional ha sido más bien tímido. Enigma (TVN), el popular programa compuesto de entrevistas, recreaciones a imágenes de archivo, dedicó más de un episodio a estudiar sus antecedentes. Efecto mariposa, espacio de Mega que tenía un énfasis similar, también revisitó el caso.
El intento más directo de la ficción fue oblicuo: la teleserie de TVN Vuelve temprano (2014), que giró en torno a la lucha de una madre por esclarecer la verdad tras el asesinato de su hijo, donde se extraían algunos elementos de la historia real. En ese momento el canal atajó los cuestionamiento asegurando que “el caso Matute es sólo una referencia para contar una historia que hablará de la relación de padres e hijos, de qué hacen los hijos cuando salen por las noches y de qué les pasa a los padres con las salidas nocturnas”.
Por tanto, la iniciativa que actualmente preparan Netflix y la productora Fábula se adentrará en una trama real enormemente mediática, pero poco explorada por los directores y guionistas del país. La plataforma de streaming confirma a Culto la realización de su propio proyecto inspirado en el joven penquista y a los principales involucrados delante y detrás de cámaras. De entrada, oficializa la producción como una “nueva serie inspirada en el caso Matute Johns”, evidenciando la procedencia de la historia.
“Netflix anuncia una nueva serie nacional inspirada en la desaparición y asesinato de Jorge Matute Johns, luego de que en 1999 el joven universitario desapareciera en la Región del Bio Bio, movilizando a su familia a buscar una explicación ante uno de los crímenes inconclusos más conocidos del último tiempo en el país”, detalla la compañía que cuenta con 278 millones de suscriptores en el mundo.
Fernando Guzzoni (Jesús), quien dirigirá la serie junto a Pepa San Martín (Rara), asegura que “el caso de la desaparición y asesinato de Jorge Matute Johns es uno de los más relevantes de la últimas décadas de nuestro país. La búsqueda incansable por su paradero conmocionó a Chile. La serie viene a mostrar todas las implicancias de la desaparición de un ser querido, en este caso, un joven alegre y sensible, cuya vida terminó como unos de los enigmas policiales más recordados del último tiempo”.
El director de Carne de perro (2012) y Blanquita (2022) –película inspirada en el caso Spiniak que representó a Chile en los Oscar hace dos años– agrega otra declaración que sugiere cuál será el ángulo de la ficción. “Esta producción no solo se centrará en la historia, investigación y teorías en torno al caso; también retratará la importancia de hacer memoria”, plantea.
El proyecto –aún sin título– comenzará su rodaje durante la última semana de septiembre (una vez que hayan concluido las Fiestas Patrias) y se desarrollará entre Santiago y Concepción. Se extenderá hasta diciembre, por lo que estará en plena faena cuando se conmemoren 25 años desde la desaparición de Matute Johns en Talcahuano.
A días de iniciar las grabaciones, la serie ya tiene definidos a los actores que encabezarán la historia. Según ratifica la plataforma, en su elenco estarán Alfredo Castro, Paulina García, Clemente Rodríguez, Lucas Sáez Collins, Héctor Morales y Camila Hirane.
El actor que asumirá el rol del joven desaparecido es Rodríguez, intérprete de 21 años conocido por su participación en la teleserie Casa de muñecos y en las dos temporadas de La jauría. En tanto, en cine encarnó a la versión joven del protagonista de El Conde (2023), de Pablo Larraín, y este año filmó Cuerpo celeste, la nueva cinta de Nayra Ilic.
El rol de la madre, clave en el caso real, recaerá en la protagonista de Gloria (2013). García, probablemente la actriz nacional más reconocida en el mundo, acaba de estrenar dos largometrajes de directores extranjeros en el Festival de Toronto, pero regresará al país a tiempo para el inicio de las filmaciones de la serie.
De acuerdo con información a la que tuvo acceso Culto, la producción será un policial de ocho capítulos que tendrá entre sus personajes principales a la madre, a un detective y a un sacerdote. En tanto, el personaje inspirado en Matute Johns estará presente a través de flashbacks.
Una de las particularidades de la ficción consistirá en que conservará los nombres reales. La decisión contrasta con el camino que se tomó en 42 Días en la oscuridad, la serie de Netflix y Fábula inspirada en la desaparición y homicidio de Viviana Haeger, donde se cambiaron las identidades y no se especificó el nombre de la ciudad en que transcurría la historia.
Esta vez se siguió una ruta similar a la de El caso Asunta, la miniserie sobre el mediático caso que sacudió a España en 2013 y que se estrenó con éxito en Netflix en abril pasado.
Una investigación y el rol de la familia
Las dos primeras series que Fábula realizó para plataformas de streaming tomaron como referencia casos reales. Sergio Jadue y el FIFA Gate fueron la base de El presidente, mientras que el caso La Manada estuvo en el origen de la serie La jauría (ambas terminaron en Prime Video). La elección no fue casualidad: ya en esa época, antes de la pandemia, ese tipo de proyectos tendían a ser los más atractivos para los servicios de streaming interesados en invertir en producciones en América Latina para potenciar su presencia en la región.
Fruto de ese ímpetu, la productora de los hermanos Larraín realizó Baby Bandito (Netflix), serie inspirada en el millonario robo que un grupo de sujetos ejecutó en el Aeropuerto de Santiago en 2014, y Familia de medianoche (Apple TV+), basada en un documental de 2019 que mostró a una familia de paramédicos abocada a atender emergencias en Ciudad de México, que debutará en el streaming este miércoles 25.
Siempre con ese objetivo en mente, hace un par de años la compañía contactó al periodista Rodrigo Fluxá con el interés en que escribiera una serie sobre el caso Matute Johns. El también guionista, con quien Fábula había trabajado en El presidente y en 42 Días en la oscuridad (basadas en reportajes y libros de su autoría), aceptó la propuesta y lideró una investigación que dio origen a la historia que presentará la serie de Netflix.
En el desarrollo de los guiones de la ficción también participan el dramaturgo Pablo Manzi –quien había colaborado con Fernando Guzzoni en otros proyectos– y la guionista Carla Stagno, responsable de escribir la miniserie histórica Los mil días de Allende (2023) y la película de acción Sayen (2023).
Como suele ocurrir con las producciones basadas en hechos reales, el nuevo proyecto de Netflix y Fábula ha debido sortear algunos momentos de tensión. En la previa al inicio del rodaje, recibió las críticas de María Teresa Johns, la madre del joven desaparecido. “Como familia no hemos autorizado ninguna serie que se haga con el nombre de mi hijo. Lo que ellos hacen es una serie de ficción que lejos está de la realidad. Yo no lo voy a aceptar (...) Me siento muy mal porque están lucrando con el caso de mi hijo, también lucran con el dolor de una madre, de una familia”, señaló al medio Sala de Prensa.
Sin embargo, fuentes consultadas por Culto sostienen que tanto la mamá como el hermano del joven, el abogado Álex Matute Johns, están al tanto de la iniciativa que alista la plataforma de streaming. Si bien no participan activamente en la producción ni han accedido a los guiones, se les habría informado de su existencia con anterioridad.
Ambos –así como el padre, Jorge Matute Matute, fallecido en 2011– han luchado durante años para conseguir despejar las interrogantes alrededor de la muerte de Jorge Matute Johns.
El último hito judicial ocurrió en diciembre de 2018, cuando la ministra en visita extraordinaria de la Corte de Apelaciones de Concepción, Carola Rivas, decretó el sobreseimiento temporal de la causa, no logrando establecer los responsables por la muerte y desaparición de Matute Johns, quien de acuerdo a peritajes perdió la vida por una sobredosis de pentobarbital.
Previamente, Rivas –la cuarta jueza del proceso– logró determinar que el joven había ingerido el fármaco sin su consentimiento y que los responsables lo habrían drogado para abusar sexualmente de él. En la actualidad la causa está cerrada.