“Salí del trabajo y vine corriendo. Estaba tiesa, al borde del llanto”
Esas fueron las palabras de una de las cientos de fanáticas que llegaron a las afueras del Hotel Casa Sur en Palermo, Buenos Aires, minutos después de que se anunciara la muerte del cantante y exmiembro de One Direction, Liam Payne.
El cantante británico se encontraba en la capital bonaerense acompañando a su amigo y excompañero de banda Niall Horan, quien se presentó en el Movistar Arena de Villa Crespo, el pasado 2 de octubre, con su gira The Show: Live on Tour.
Sin embargo, fue alrededor de la 17:00 horas que, producto de un llamado al 911, la policía encontró sin vida al músico tras sufrir una caída desde el tercer piso del Hotel Casa Sur, donde se estaba hospedando y donde tan solo unas horas antes había compartido con sus fanáticas.
La noticia de la muerte del Payne se expandió rápidamente por redes sociales y no pasó mucho tiempo para que sus fans comenzaran a rodear la entrada del hotel, donde prendieron velas, dejaron flores y colgaron cáeteles para velar a su ídolo.
“Siempre estarás en nuestros corazones”, “te amo Liam ahora y por siempre”, escribieron los fanáticos en pancartas que pegaron en un árbol cercano al hotel. Entre lágrimas y sentados en la calle, los jóvenes se quedaron fuera del recinto hasta horas de la madrugada, cantando algunos de los éxitos del artista y de One Direction en honor a su legado.
Esta mañana, la familia del cantante emitió sus primeros comentarios a raíz de la muerte de Payne, asegurando que se están apoyando lo mejor que pueden como familia. “Tenemos el corazón roto. Liam siempre vivirá en nuestros corazones y lo recordaremos por su alma amable, divertida y valiente (...) pedimos privacidad y espacio en este momento tan horrible”.