Aún estoy aquí (Ainda estou aqui, en portugués) es probablemente la película latinoamericana más comentada del último año. Estrenada en la 81° edición del Festival de Venecia, la cinta más reciente del brasileño Walter Salles ha conquistado a la crítica y ha alcanzado canduidaturas a los Bafta y a los Goya.
Su momento de mayor gloria fue el pasado 5 de enero, día en que su protagonista, Fernanda Torres, logró el reconocimiento a Mejor actriz de drama en los Globos de Oro, superando a estrellas como Angelina Jolie (Maria Callas) y Nicole Kidman (Babygirl).
En medio de esa efervescencia –y a horas de que se conozca si consigue un lugar en el listado de nominados a los Oscar–, la distribuidora Andes Films confirmó que debutará en cines chilenos el próximo 20 de febrero. Por cierto, el mismo día en que están programadas El brutalista y Un completo desconocido, dos de las cartas más fuertes de la temporada de premios.
Basado en las memorias del escritor Marcelo Rubens Paiva, el largometraje sigue la historia de Eunice Paiva (Torres) durante la dictadura militar brasileña en 1971. La mujer, madre de cinco hijos, se vuelca al activismo político cuando su marido, el diputado izquierdista Rubens Paiva, es capturado por el régimen.
Aún estoy aquí no sólo se ha convertido en un fenómeno en los cines brasileños, sino que también en Portugal, donde más de 3.5 millones de personas ya la han visto. En tanto, en Estados Unidos registró el mejor promedio de asistencia por sala en su fin de semana de estreno.
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