*¿Llegó el momento de Netflix?

La ceremonia de los Globos de Oro y el listado de nominados a los Bafta consolidaron a Emilia Pérez como una rival de temer. Esta mañana confirmó su estatus en el anuncio de los Oscar, totalizando 13 nominaciones, el mismo número que hace un año consiguió Oppenheimer y sólo una por debajo del récord que ostentan Titanic, La la land y Eva al desnudo. La única omisión que seguramente lamentó fue la de Selena Gomez, que fue excluida en Mejor actriz de reparto.

Como distribuidor del filme en Estados Unidos, Netflix puso en práctica toda su musculatura para montar una campaña de premios que hasta ahora ha demostrado ser impecable. Lo llamativo es que la película del francés Jacques Audiard es una de sus apuestas más singulares con la que han irrumpido en el evento: un musical hablado en español, filmado mayoritariamente en Francia y criticado en México, la ciudad en que transcurre la historia, un drama sobre un narcotraficante que recurre a los servicios de una abogada para fingir su muerte y transicionar.

Foto: Universal Pictures

*Las otras favoritas

Situada en Estados Unidos tras la Segunda Guerra Mundial, El brutalista sigue durante años a un arquitecto de origen judío que se dedica a trabajar en una obra para un exitoso empresario. Ambiciosa en escala y en temas, totaliza diez nominaciones y tiene los méritos para soñar con el premio mayor.

Ese mismo número es el que alcanzó Wicked, la adaptación del exitoso musical que ha llenado las salas de Broadway (curiosamente se le resistió la candidatura a Mejor guión adaptado). De no ser porque no incluye composiciones inéditas, seguramente habría entrado en la carrera por Mejor canción original, abultando su cosecha.

Un completo desconocido, la cinta biográfica de Bob Dylan, logró un espaldarazo importante, sumando ocho menciones. Aunque Cónclave también llegó a ocho, lamentó no entrar en dos categorías que se daban por seguras (Mejor director y Mejor fotografía). No fue el caso de Anora, que logró un lugar en todas las categorías que pronosticaban los expertos (seis). Con cinco nominaciones, La Sustancia vivió una jornada alegre y tiene buenas posibilidades de imponerse en Mejor actriz, donde Demi Moore corre con ventaja.

Foto: Macall Polay, Courtesy of Searchlight Pictures.

*Ed Lachman repite por una cinta de Pablo Larraín

El cineasta nacional se conoce desde hace años con Ed Lachman, pero no habían podido colaborar en un largometraje. La primera vez fue en El Conde (2023), por la que el estadounidense fue reconocido con una candidatura a Mejor fotografía, y la segunda fue Maria Callas, el largometraje de Larraín sobre la afamada soprano, que también fue considerado en el listado anunciado esta mañana. Así, Lachman alcanzó su segunda candidatura consecutiva y la cuarta de su carrera. Esta vez se medirá ante El brutalista, Duna: Parte dos, Emilia Pérez y Nosferatu.

Eso sí, Maria Callas también aspiraba a lograr un lugar en Mejor actriz, pero la interpretación de Angelina Jolie no pudo repetir la hazaña que previamente habían logrado Natalie Portman y Kristen Stewart por los anteriores filmes en inglés del director chileno. En un año particularmente reñido, las cinco seleccionadas terminaron siendo las protagonistas de cintas consideradas en Mejor película (desde Demi Moore por La Sustancia hasta la española Karla Sofía Gascón por Emilia Pérez).

Foto: Pax Jolie-Pitt/Netflix © 2024.

*El ascenso de Aún Estoy Aquí

El brasileño Walter Salles tiene historia en los Oscar. Estación Central estuvo nominada a dos categorías en 1999 (incluyendo Fernanda Montenegro como Mejor actriz) y seis años después repitió esa presencia con Diarios de motocicleta, celebrando el triunfo del uruguayo Jorge Drexler en Mejor canción original (Al otro lado del río).

Su largometraje más reciente, Aún estoy aquí, no sólo superó ese número, sino que logró entrar en la categoría principal, Mejor película, donde se medirá ante Emilia Pérez, El brutalista y el resto de las principales candidatas. En el la historia Fernanda Torres (hija de Montenegro) interpreta a Eunice Paiva, madre de cinco hijos que se vuelca al activismo tras la detención de su esposo a manos de la dictadura. Llegará a cines nacionales el próximo 27 de febrero.

Foto: Cuba Scott

*El trago amargo de la secuela de Duna y la caída de Gladiador II

A pesar de que existe consenso en que Denis Villeneuve se superó a sí mismo con la continuación de la historia, Duna: Parte dos se tuvo que conformar con cinco menciones, la mitad que la primera entrega (que ganó seis y fue la más galardonada de esa edición). Probablemente el mayor revés es que el cineasta canadiense volvió a quedar fuera de la carrera de Mejor director. Quizás haya mejor suerte con la tercera parte, que comenzará sus filmaciones durante este año.

Gladiador II se ubicaba como una candidata poderosa en las primeras semanas de la temporada de premios. Sin embargo, las críticas no fueron tan entusiastas como con la primera entrega (que obtuvo cinco reconocimientos hace 24 años) y en la industria no generó el mismo furor. Hoy su cosecha fue pobre: sólo una nominación, la de Mejor diseño de vestuario. Nada para Denzel Washington ni para los otros apartados técnicos (un rubro donde les fue mejor a películas como Nosferatu y Wicked).

*Fuera: Almodóvar, Leigh y Guadagnino

Las ironías de los Oscar: Pedro Almodóvar, un nombre habitual en la premiación, fue completamente excluido con su primer largometraje hablado en inglés, La habitación de al lado. La cinta ganó el León de Oro en el Festival de Venecia 2024, pero nunca terminó de ganar tracción en la principal carrera de Hollywood. Sony Classics, su distribuidor en Estados Unidos, observó esa falta de impulso y al final depositó gran parte de sus fichas en la brasileña Aún estoy aquí.

El británico Mike Leigh tampoco pudo conseguir un lugar con Hard truths, su alabado retrato de una mujer de carácter volcánico (interpretada por Marianne Jean-Baptiste). El italiano Luca Guadagnino tuvo el mismo destino, aunque en su caso tenía dos títulos con posibilidades (Desafiantes en Mejor banda sonora y Queer en Mejor actor).

En la otra cara de la moneda, Ali Abbasi logró que sus dos actores –Sebastian Stan y Jeremy Strong– fueron considerados por El aprendiz, su filme biográfico sobre Donald Trump y Roy Cohn, el oscuro abogado que ayudó al magnate durante sus inicios. Tuvo un discreto recorrido por salas, pero seguramente su presencia en los Premios de la Academia (y la contingencia) ayudarán a descubrirla en formato casero.

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