Luego de mantener sus puertas abiertas al público durante más de cuatro años, entre octubre de 2015 y febrero de 2020 –cuando sufrió tres incendios consecutivos que produjeron severos daños en su infraestructura–, el Museo Violeta Parra podría estar viviendo sus últimos días.
Isabel Allende, en entrevista con The Clinic, anunció este viernes que aceptó un ofrecimiento del rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, para trasladar las obras de la cantautora al Campus Oriente de la institución, de modo que sería inminente un cese de las funciones del espacio cultural.
“Nos vamos con todas las obras de la Viola a la Universidad Católica. Y para irnos, es necesario disolver el Museo Violeta Parra. Y estamos en eso”, explicó sobre un proceso que debiera avanzar de manera tal que “lo más probable es que las cosas estén resueltas a partir de marzo del próximo año, a comienzos del año académico”. Un paso que concreta la intención que expresó a Culto a mediados de este mes. “Personalmente, no tengo interés en reconstruir ese lugar”, planteó sobre el espacio ubicado en Vicuña Mackenna.
En una declaración pública que cuestiona a Parra, los trabajadores y las trabajadoras del museo indicaron que “tras enterarnos, con sorpresa y frustración, por los medios de comunicación y posterior repercusión en redes sociales sobre las intenciones de la Fundación Violeta Parra, de poner fin a la institucionalidad y con ello la fuente laboral y sustento de muchas familias, resulta violento y fuera de cualquier canal de información formal lo ocurrido”.
Críticos de la decisión “en cuanto a fondo y forma”, los funcionarios añadieron: “Ante toda adversidad hemos cumplido permanentemente con una gestión ejemplar, siendo destacados nacional e internacionalmente como un referente cultural, mostrando resiliencia y compromiso en seguir desarrollando nuestras funciones, pese al panorama adverso”.
“Rechazamos categóricamente la denostación sufrida, formulada no solo en esta entrevista, sino que en reiteradas oportunidades, cuestionando públicamente nuestro trabajo, sin un conocimiento real de los procesos”, agrega el texto.
“La preservación del legado que alberga el Museo Violeta Parra desde el año 2015 ha incluido profesionales con reconocimiento y trayectoria validada en el ámbito de la administración, conservación, difusión y educación del patrimonio cultural, atravesando procesos de captación de personal formal y aprobados por el directorio de la Fundación Museo Violeta Parra para su dicha contratación”, explican los trabajadores.
En tanto, respecto al futuro de la obra de la artista nacional, Isabel Parra explicó que evalúan la figura de un comodato. “Yo tengo la confianza y toda la fe de que saldremos ganando y que la Violeta también. Las obras no solo se exhibirán en los salones y pasillos del Campus Oriente y la Casa Central, sino que habrá además estudios sobre el arte visual de Violeta Parra, se estimulará el interés académico en su obra y también habrá itinerancias, que no hemos tenido nunca”, detalló.