El presidente y director de operaciones de la compañía Weinstein, David Glasser, fue despedido tras la votación unánime de la junta directiva, anunciada el viernes en la noche.
Glasser se había incorporado a la empresa en 2008. Si bien la declaración no especificó la causa del despido, el hecho se suma a la reciente demanda que el fiscal de Nueva York, Eric Schneiderman, entabló contra la compañía tras una investigación iniciada hace cuatro meses.
En la demanda el fiscal asegura que la empresa violó los derechos civiles y humanos de sus trabajadoras, al no protegerlas de las conductas abusivas y discriminatorias de Harvey Weinstein. Además, revela nuevas acusaciones de conducta sexual inapropiada por parte del productor. En cuanto a Glasser, señala que no habría atendido las quejas que llegaban a través del departamento de recursos humanos de la empresa. La demanda del fiscal contra la compañía se presenta justo en el momento en que esta retomaba las negociaciones para su venta, luego de estar desde octubre del año pasado evitando caer en la quiebra.
En agosto de 2015, David Glasser había anunciado que dejaría su cargo. Sin embargo, un mes más tarde dio a conocer su permanencia como presidente de la compañía, bajo un nuevo contrato y con los esfuerzos de Bob Weinstein por retenerlo.