Fue en octubre de 1971 cuando el pianista y director de orquesta estadounidense James Levine (74) hizo su debut en el Metropolitan Opera, con la dirección de la ópera Tosca del compositor italiano Giacomo Puccini. Cuatro meses después, fue nombrado director principal del Met, el teatro donde en 1976 se convirtió en director musical, puesto que ocupó durante 40 años, hasta que jubiló en 2016.
Verdi, Puccini, Mozart, Wagner, Debussy y Berg fueron parte de su amplio repertorio, dentro de las más de 2.500 actuaciones de la compañía dirigidas por su batuta. Incluso, en 1983 James Levine fue portada de la revista Time, y a lo largo de su carrera acumuló 10 premios Grammy por grabaciones de ópera, interpretaciones corales y de orquesta.
Sin embargo, la brillante carrera del que es probablemente el director de orquesta más importante de Estadso Unidos concluyó, al menos en Nueva York, este lunes: las denuncias de acoso y abuso sexual hacia jóvenes artistas provocaron su despido desde el Metropolitan. La decisión fue tomada luego de que la institución realizara una investigación de más de tres meses y que contó con 70 entrevistados.
"La investigación reveló evidencia creíble de que el señor Levine había participado en una conducta sexualmente abusiva y acosadora antes y durante el período en que trabajó en el Met", declaró la institución a través de un comunicado.
Los antecedentes
A fines de 2017, The New York Times dio a conocer las acusaciones de abuso y acoso sexual que un hombre había hecho en contra de James Levine. Según el informe de la policia de Lake Forest en Illinois, elaborado en 2016, el sujeto acusaba a Levine de haber abusado sexualmente de él tres décadas atrás. Ambos se habrían conocido en el Festival de Ravinia, evento de música clásica que Levine dirigió desde 1973.
Fue en 1985, cuando el denunciante tenía 15 años, la primera vez que el director de orquesta se comportó de forma inapropiada con él, pero las situaciones impropias continuaron durante veranos siguientes, explicaba la víctima en el informe policial.
Pero las acusaciones sobre la conducta inapropiada del director de orquesta, eran un secreto a voces que se arrastraba desde mucho antes. Ya en la década de los ochenta, el músico y el Metropolitan Opera, debieron enfrentar las constantes preguntas de los medios sobre las acusaciones por conducta sexual inapropiada. Incluso, Johanna Fiedler, quien fue encargada de prensa del Met durante 15 años relata en su libro Molto Agitato: el caos detrás de la música en la Ópera Metropolitana, cómo eran cada vez más frecuentes las consultas con respecto a la conducta de Levine. "Cada vez, la oficina de prensa de Met señalaba incansablemente la naturaleza cíclica de los chismes y la completa falta de sustancia", relata.
En 1987, en una entrevista con The New York Times James Levine enfrentó los rumores que circulaban sobre su comportamiento inapropiado. "Esto no es nada nuevo para mí. Hace diez años, me llamaron por informes sobre cargos morales en Pittsburgh, Hawai o Dallas. Mis amigos y mis enemigos lo comprobaron y hasta el día de hoy, no tengo la menor idea de dónde vinieron esos rumores o para qué sirvieron. Ron Wilford (manager de James Levine) dice que es porque la gente no puede creer la historia real, que soy demasiado bueno para ser verdad", señaló en esa época.
Treinta años después, y en medio del agitado clima por denuncias de acoso y abuso sexual en el mundo artístico, la desvinculación del director de orquesta del Met, es un hecho sintomático. Además de la pruebas encontradas en la investigación, sobre la conducta de Levine, antes y durante su estadía en el Met, el informe señaló además que "el señor. Levine participó en conductas sexualmente abusivas y hostiles hacia artistas vulnerables en las primeras etapas de sus carreras, sobre quienes el señor Levine tenía autoridad. Esto motivó finalmente que la institución declara inadecuado continuar trabajando con el hombre que durante más años estuvo a cargo de su dirección musical.