A Gioacchino Rossini, el genio de la ópera bufa, lo perseguía la ironía incluso si no lo quería. No sólo nació un 29 de febrero, que teóricamente significa celebrar la fecha natal cada cuatro años, sino que se volvió conocido a través de lo que menos hizo: una ópera seria. Se trató de Guillermo Tell, cuya obertura fue la banda de todos los programas de radio, series de televisión y películas de El llanero solitario.
Poseedora de una melodía literalmente galopante (aunque Rossini quería describir un ataque de soldados), Guillermo Tell ha sido el correlato musical número uno de los dibujos animados, desde los primeros cartoons de Mickey Mouse y Bugs Bunny hasta Los Picapiedra, sin descontar su presencia en películas ejemplares como La naranja mecánica o en comedias adolescentes como El diario de la princesa.
Ahora, el célebre pasaje musical es parte central de Sinfonías para familias II, el concierto programático que la Orquesta Sinfónica de Chile ofrece este sábado a las 17.00 h en el Teatro Universidad de Chile.
"Rossini es algo así como la voz unificadora de todo el concierto", explica el director François López-Ferrer, quien estará a cargo de la Sinfónica. "En el escenario hay tres personajes: un pregonero, una suerte de secretaria (interpretada por Carmen Lavanchy, una de las fundadoras de Mazapán) y yo. Los tres hablamos, mientras la orquesta toca. Por ejemplo, tocamos segmentos de música que puede representar el agua (El mar de Debussy) o la tierra (Estancia de Ginastera)", detalla el conductor.
Las presentaciones, que durante la semana han tenido de público a colegios invitados, también recurren a extractos de populares piezas del repertorio, desde la Quinta sinfonía de Beethoven o la Sinfonía N° 40 de Mozart a la obertura Romeo y Julieta de Tchaikovsky. "Una parte importante del programa es también tocar los finales de las sinfonías. Ahí están Beethoven o incluso la Sinfonía N° 1 de Mahler. Lo importante de estos conciertos es interactuar con los muchachos. Una de nuestras tareas es dar al menos la posibilidad de que los chicos conozcan a los compositores", resume el hispano-estadounidense.
En la misma línea de las presentaciones musicales de carácter educativo se inscribe el Sueño de una noche de verano de Felix Mendelssohn, la composición basada en la obra de Shakespeare cuya Marcha nupcial se ha vuelto un estándar de las ceremonias matrimoniales. Se dará en el ciclo de El Pequeño Municipal desde hoy a las 12.30 h hasta el domingo 24, donde estará a las 12.00 y 16.00 h. Dirigido por Pedro Pablo Prudencio, el concierto dramatizado tendrá puesta en escena del coreógrafo Mathieu Guilhaumon, director del Ballet Nacional Chileno, y de la actriz Millaray Lobos.
En el Teatro Municipal también habrá hoy otra iniciativa que busca acercar la música a más público: la ópera chilena El Cristo de Elqui se transmitirá en vivo vía streaming a las 19.00 h desde los sitios municipal.cl y mediastre.am. "Ha tenido gran éxito de público, con sala llena todos los días y eso me pensar que hay mucho público que desea verla", afirma Frédéric Chambert el director del Municipal. Y adelanta: "Próximamente además pondremos El Cristo de Elqui en la plataforma de conciertos Selecta (selectatv.com), que es una especie de Netflix de música clásica con contenido pagado y libre. Nuestra ópera será gratis, por supuesto".
