El número promedio de nuevos casos de coronavirus en EE.UU. se ha multiplicado por nueve desde principios de julio, y las hospitalizaciones están en su tasa más alta desde febrero. En algunas partes del país, los hospitales están al máximo. Como si la situación no fuera lo suficientemente mala, están comenzando a surgir nuevas preocupaciones. Anthony Fauci, principal asesor médico del Presidente Joe Biden para la pandemia, dice que la propagación continua del virus podría permitir que surjan y se propaguen nuevas variantes -posiblemente más resistentes a las vacunas- si más personas no se inoculan. Los expertos ya están viendo más casos de la variante lambda (o andina), designada por la OMS como una “variante de interés”.

Así resumió CNN, a principios de esta semana la situación epidemiológica imperante hoy en Estados Unidos. Y es que a medida que la tasa de vacunaciones contra el Covid-19 aumentó y el número de nuevos casos se desplomó en la primavera, muchos norteamericanos pensaron que les esperaba un verano sin preocupaciones. Pero el panorama es distinto.

El alza de casos está siendo impulsado por estadounidenses no vacunados, quienes, según los funcionarios de salud, también representan la mayoría de los pacientes hospitalizados y muertos por Covid-19 en todo el país. Lo que alimenta el aumento es la peligrosa variante delta, una cepa tan contagiosa que es probable que quienes no hayan sido infectados previamente o no hayan sido vacunados la contraigan, dijo a la cadena norteamericana Scott Gottlieb, jefe de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) durante la administración de Donald Trump.

En ese sentido, la directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU., Dra. Rochelle Walensky, advirtió que el país pronto podría ver los mismos niveles de casos diarios que en enero, es decir, varios cientos de miles al día, según dijo a CNN.

A continuación, algunas de las cifras que, según CNN, muestran cuán grave es el aumento de Covid-19 en Estados Unidos.

A finales de junio, Estados Unidos promediaba unos 11.000 contagios al día. Sin embargo, hasta el viernes, el promedio de siete días de casos diarios de Covid-19 era de más de 107.100, el índice más alto en casi seis meses, según datos de la Universidad Johns Hopkins.

La última vez que el promedio de casos diarios superó los 100.000 fue el 11 de febrero. El promedio de contagios diarios se ha multiplicado por nueve desde principios de julio, destaca CNN. La mayoría de las infecciones provienen de áreas con bajas tasas de vacunación, dijo el lunes el coordinador de respuesta ante el Covid-19 de la Casa Blanca, Jeff Zients. Un tercio de todos los contagios en Estados Unidos en la semana anterior provino de Florida y Texas, detalló.

Más de 66.000 estadounidenses permanecían hospitalizados con Covid-19 en todo el país hasta el sábado por la noche, según datos del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. Desde febrero que esta cifra no era tan alta, según la cadena norteamericana.

Florida, que lidera la cantidad de hospitalizados por Covid-19 en el país, tuvo 12.373 adultos y 143 niños internados el jueves, según datos de los CDC. Los funcionarios de Louisiana informaron el viernes un récord de 2.421 personas hospitalizadas con Covid-19 en todo el estado. De los pacientes internados, aproximadamente el 91% no está vacunado, dijeron las autoridades a principios de semana. La semana pasada, en tanto, Arkansas informó un mínimo histórico de 25 camas UCI disponibles en todo el estado. En Mississippi, los funcionarios de salud señalaron el miércoles que solo había seis camas UCI libres.

Al respecto, destaca el diario The Guardian, los funcionarios de salud en Mississippi advirtieron que el sistema hospitalario del estado está al borde del colapso debido a un aumento en las hospitalizaciones por Covid-19 en el sur de EE.UU. a medida que la variante delta avanza por el país. Había 1.378 personas hospitalizadas en Mississippi, hasta el miércoles, cerca del número más alto en el estado desde que comenzó la pandemia.

“Personalmente, me siento como si fuera un controlador de tráfico aéreo, y todos los días veo chocar dos aviones de pasajeros”, dijo el Dr. Thomas Dobbs, oficial de salud de Mississippi. “Veremos muchas muertes en los próximos días, es simplemente inevitable”, agregó.

Casi 72.000 niños y adolescentes en Estados Unidos dieron positivo por Covid-19, lo que marca un aumento “sustancial” del 84% respecto de la semana anterior, dijo la Academia Estadounidense de Pediatría la semana pasada. Entre el 22 y el 29 de julio, el grupo registró 71.726 casos. Un incremento sustancial respecto de la semana anterior, cuando se informaron alrededor de 39.000 casos, y casi cinco veces más de lo que se reportó a finales de junio.

Casi 1.600 niños fueron hospitalizados con Covid-19 en Estados Unidos, la semana pasada, según los datos hospitalarios compilados por los CDC, un nuevo récord de siete días y un aumento de 27% respecto de la semana anterior informó la revista Forbes. Las hospitalizaciones pediátricas se han disparado en 13 estados, predominantemente en el sur del país, agrega.

Aunque la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP) calcula que solo el 1 % de los niños contagiados acaban ingresados, la semana pasada hubo una media de 216 niños hospitalizados cada día, el mismo nivel que durante la crisis sanitaria de enero pasado. Por eso, la AAP escribió una carta la semana pasada a la FDA pidiéndole que autorice cuanto antes la vacunación para los niños de entre cinco y 11 años.

El Presidente Biden se mostró este martes “muy preocupado” por los casos de “niños pequeños, de cuatro, cinco o seis años, ingresados en hospitales”. “Los niños se están contagiando porque en la mayoría de los casos viven en estados y comunidades con una baja tasa de vacunación, y se contagian de adultos no vacunados”, lamentó el mandatario.

Detrás del último aumento de casos en el país está la variante delta, que ahora representa más del 93% del coronavirus que circula en EE.UU., según datos de los CDC. El número es aún mayor en partes del país, incluidas Iowa, Kansas, Missouri y Nebraska, donde delta representa más del 98% del virus circulante.

Esos números, destaca CNN, muestran un rápido aumento en la prevalencia de la variante en EE.UU. A fines de mayo, los CDC estimaron que Delta representaba aproximadamente el 3% de los nuevos casos de Covid-19.

Dobbs dijo que el estado ha visto un “aumento fenomenal” en los casos diarios que es “enteramente atribuible a la variante delta, que está barriendo Mississippi como un tsunami”. Aproximadamente el 97% de los casos nuevos se encuentra entre personas no vacunadas, indicó.

Más del 98% de los residentes de EE.UU. ahora viven en áreas donde existe un riesgo “alto” o “sustancial” de transmisión comunitaria de Covid-19, en comparación con el 19% de los residentes hace solo un mes, según datos de los CDC. Este brusco giro ha sido impulsado en gran parte por la altamente infecciosa variante delta y las bajas tasas de vacunación en muchas regiones, señala CNN.

Los CDC dijeron a fines del mes pasado que incluso las personas completamente vacunadas que viven en esas áreas deben usar mascarillas en el interior, para evitar una mayor propagación de la variante delta. La guía de la agencia para las personas no vacunadas aún mantiene la recomendación de que estas personas deben continuar usando mascarillas hasta que estén completamente inoculadas.