Los bancos cerraron 131 oficinas de atención a público en 2022, lo que significa que las redujeron en un 8% en un año. Ello, considerando que al término de 2021 la banca contaba con 1.734 oficinas, pero a diciembre de 2022 tenían 1.603, según cifras que consolida la Comisión para el Mercado Financiero (CMF).
Esta es la segunda mayor reducción de oficinas que ha hecho la industria al menos en la última década. La disminución récord -en número- se produjo en 2021, cuando cerraron 166 oficinas.
Con lo anterior, ya encadenan ocho años consecutivos a la baja en cuanto a sus oficinas de atención a público. Es más, solo en los últimos cinco años la banca las ha reducido en más de un cuarto, pasando de las 2.186 que tenían al cierre de 2017, a las 1.603 con que terminaron el año pasado. Esto significa una baja de 27%, o 583 oficinas menos.
Lo que la CMF considera en estas cifras como “oficina”, es cualquier dependencia en que la institución bancaria atiende público, que incluye casa matriz, sucursales, cajas auxiliares y oficinas de apoyo. Acá no se consideran las sucursales en el exterior.
La baja de oficinas ocurre en momentos en que los canales digitales de la banca han ido ganando terreno. Además, si bien las instituciones financieras han ido cerrando sucursales físicas, también hay algunos bancos que han empezado a operar con sucursales remotas, una modalidad donde trabajan ejecutivos en una oficina, pero atienden por teléfono las solicitudes de los clientes, realizando lo mismo que harían de manera presencial. Esta es una modalidad que se aceleró con la pandemia.
Por otro lado, al ver las cifras sobre lo que la CMF considera sucursales, que son un tipo de oficina bancaria de las cuales pueden depender administrativamente otros centros de atención, como cajas auxiliares y oficinas de apoyo, se obtiene que el año pasado se cerraron 139, lo que significa un retroceso de 9%. Así, las sucursales encadenan nueve años consecutivos a la baja y totalizaban 1.481 a diciembre pasado.
El banco que más redujo sus oficinas durante el año pasado fue Ripley, recortando un 21%, a 56. Eso significó que cerraron 15 oficinas en doce meses.
Por número de oficinas cerradas es Santander el que anota el mayor número, ya que según cifras de la CMF a diciembre contaba con 40 oficinas menos que en 2021, totalizando 286 oficinas al cierre del año pasado (-12%).
Desde el banco de capitales españoles comentaron que “cada vez son más los clientes de la entidad que prefieren y valoran operar sus productos y servicios sobre la base de plataformas digitales, lo que está en línea con las tendencias internacionales. Como banco siempre hemos buscado brindar servicios oportunos y de calidad, alineados con las preferencias de nuestros clientes, incrementando sus niveles de satisfacción, algo que confirman distintos indicadores”.
Asimismo, añadieron que “seguimos invirtiendo en nuestro exitoso modelo Work/Café, el que tiene los más altos estándares de servicio a nivel nacional e internacional. Al cierre de 2022 este modelo alcanzó 76 oficinas en el país y este año añadirá otras siete”.
En tanto, Bci cerró 25 oficinas y terminó el año 2022 con 200. Desde dicha entidad señalaron que “en línea con los cambios en lo hábitos de los clientes, en Bci actualizamos nuestra oferta de atención onminicanal en función de sus nuevos requerimientos. Nuestro objetivo es generar una experiencia más rápida, simple y eficiente, sin perder la cercanía y la personalización que se logra con el conocimiento profundo de los clientes”.
Itaú las bajó en 21, por lo que a diciembre tenía 115. En Scotiabank cerraron 20 oficinas y terminaron el año con 109. Banco Falabella redujo cerró once oficinas y concluyó con 84, mientras que en Banco de Chile cerraron seis oficinas y a diciembre tenían un total de 266, y en BancoEstado cerraron una y quedaron con 399.
A diferencia de dichas instituciones, en Security mantuvieron sus 20 oficinas y en Bice abrieron una, terminaron 2022 con 24.
Número de empleados
Así como las oficinas y sucursales, el número de empleados que hay en los bancos también ha venido a la baja en el último tiempo. De hecho, durante la pandemia la banca redujo su dotación en 3.838 trabajadores. Esto, si se considera que al cierre de 2019 tenían un total de 58.093 empleados y al terminar el año 2021 eran 54.255.
Pero en 2022 se revirtió dicha tendencia y el conjunto de la banca dejó de reducir su dotación. Así, según cifras de la CMF, el año pasado hubo una leve alza de 0,3% en el número de trabajadores que hay en la industria, ya que subieron en 173, terminando en 54.428. Se trata de la primera vez en cuatro años que las instituciones financieras no disminuyeron su dotación.
