“Para mí, este era un trabajo de ensueño. Y, lamentablemente, se convirtió en una pesadilla”, dijo el lunes, Brittany Commisso, una de las 11 mujeres que denunciaron al gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, quien está acusado de acosarlas sexualmente, según un informe condenatorio publicado la semana pasada por la fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James. Commisso, anteriormente conocida como Asistente Ejecutiva #1, decidió romper su silencio en una entrevista exclusiva con el programa CBS This Morning y el diario The Times Union.

Commisso empezó a trabajar en la oficina del gobernador en 2017, y el lunes habló por primera vez desde que se presentó la denuncia penal contra Cuomo la semana pasada.

Aunque no fue la primera mujer en presentar acusaciones de conducta sexual inapropiada contra Cuomo, la exasistente ejecutiva figura en el primer lugar en el informe del fiscal general. “Creo que mi historia aparece primero debido a la naturaleza de la conducta inapropiada del gobernador”, dijo Commiso. “Me tocó, no sólo una vez, sino dos”.

La mujer de 32 años acusa al gobernador de haberla tocado por primera vez el 31 de diciembre de 2019, cuando estaba en su mansión para ayudarlo con un discurso. Según Commisso, tras terminar el borrador, Cuomo sugirió que se tomaran una selfie juntos. “Sentí, mientras tomaba la selfie, su mano bajando por mi espalda”, dijo la funcionaria.

A causa de los nervios, las fotos salieron movidas, por lo que Cuomo sugirió que volvieran a tomarlas en el sillón, a lo que la mujer accedió porque pensó que ya no podría tocarla en esa posición. “Así que nos sentamos en el sofá y en la foto tengo mi brazo envuelto alrededor del hombro, casi como si nos estuviéramos tomando una foto con un amigo. Y obtuve una foto clara sentada (...) y ahora se ha dado a conocer al público”, señaló Commisso.

La segunda vez habría sido en la misma mansión, en noviembre de 2020. Durante ese encuentro, Cuomo la habría abrazado de “manera sexualmente agresiva”.

Según el relato de la mujer, tras cerrar la puerta, el gobernador la tocó por segunda vez. “Volvió a mí y fue entonces cuando puso su mano en mi blusa y tocó mi pecho sobre mi sostén”, contó.

“Sucedió tan rápido que no dijo nada. Cuando lo detuve, simplemente se alejó”. Cuomo ha negado ambas acusaciones, diciendo sobre la segunda que “tocar los senos de una mujer, a la que apenas conozco, con 10 empleados alrededor, con mi familia en la mansión, y decir ‘no me importa quién nos vea’. Tendría que perder la cabeza para hacer tal cosa”.

“Yo sé la verdad. Él sabe la verdad”, dijo Commisso, quien calificó la respuesta del gobernador de “repugnante”. “Si eso es lo que tiene que decir para sentirse mejor, realmente lo siento por él”, agregó.

La funcionaria dijo que nunca pensó hacer públicas sus acusaciones hasta que vio a Cuomo negar las denuncias de acoso sexual durante una conferencia de prensa en marzo de este año, asegurando que “nunca tocó a nadie de manera inapropiada”. “Tiene esa sonrisa de que cree que es intocable”, señaló la mujer.

“La gente no entiende que este es el gobernador del estado de Nueva York. Hay policías que están afuera de la residencia y hay personal en la residencia. Esos policías que están ahí, no están para protegerme. Están allí para protegerlo a él”, aclaró.

“Lo que hizo fue un crimen”, señaló Commisso, agregando que “debe rendir cuentas”.

Cuomo, por su parte, ha negado todas las acusaciones y se ha resistido a todos los pedidos de renuncia de sus compañeros demócratas, incluso los del Presidente Joe Biden. Sin embargo, podría enfrentar un juicio político y destitución por parte de los legisladores estatales. El gobernador tiene hasta el final de esta semana para presentar pruebas en su defensa en la investigación de juicio político de la Asamblea Estatal.

“Nunca he tocado a nadie de forma inapropiada, ni he hecho insinuaciones sexuales inadecuadas”, dijo Cuomo en un comunicado grabado desde su oficina el martes 3 de agosto.

En medio del escándalo, una importante asistente del gobernador decidió renunciar el domingo. Melissa DeRosa, secretaria de Cuomo, fue mencionada 187 veces en el informe de 168 páginas, siendo acusada de encubrir las denuncias contra el gobernador y tomar represalias contra una de las mujeres. Sin embargo, DeRosa no abordó las acusaciones en su declaración del domingo.

Además, Roberta Kaplan, la presidenta de Time’s Up -una organización que lucha por la igualdad de género y aboga en nombre de las sobrevivientes de abuso sexual- renunció el lunes luego de que el informe presentado por la fiscal general de Nueva York dijera que había asesorado a Cuomo durante el año pasado.

“Robbie Kaplan, copresidente de la junta, se ha retirado de la junta. Ella y nosotros estamos de acuerdo en que es lo correcto y apropiado”, dijo la organización a través de un comunicado.

Gobernador de Nueva York desde 2011, siendo reelegido en 2014 y 2018, Cuomo, de 63 años, se había convertido en una estrella a nivel nacional por su manejo de la pandemia durante el año pasado. Ahora, su carrera política podría terminar en cualquier minuto.