Es el jueves 29 de abril. Un mes y cuatro días después de haberse decretado el confinamiento total de la Región Metropolitana llega a su fin. El supermercado de Manquehue con Los Militares, que antes exigía un permiso para ingresar, ya no lo hace. Tampoco la farmacia de Eliodoro Yáñez con Manuel Montt. El Parque Metropolitano ahora abre de 6.00 a 19.00, y las personas pueden subirse al teleférico. Los centros comerciales, aunque con aforo más reducido, también están operativos y los timbres vuelven a sonar en los colegios que decidieron regresar. Incluso, algunos organilleros se dejan ver en barrios residenciales.
Es la realidad de un nuevo amanecer en 10 comunas de la capital. Justo en el día en que las autoridades de Salud reportan 6.889 nuevos casos y 174 nuevos fallecidos, Alhué, Melipilla, Independencia, Las Condes, Talagante, Vitacura, Lo Barnechea, Providencia, La Reina y Ñuñoa viven un nuevo primer día en Fase 2 del plan Paso a Paso.
“Era muy necesario para nosotros”, revela Manuel Vega, quien tiene un puesto de ropa en el corazón de Providencia. En efecto, la tienda, que vende principalmente prendas de mujer, tiene fila de espera para ingresar. “Quizás sea por el Día de la Madre o la gente estuvo mucho tiempo sin poder comprar, vaya a saber uno”, se pregunta.
“Todas las medidas son absolutamente sanitarias, sin relación con el Día de la Madre”, decía casi en paralelo la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza.
Así como ese pequeño local, desde temprano los grandes centros comerciales se llenan de movimiento. También de personas. El Costanera Center y el Parque Arauco ven aglomeraciones importantes para hacer ingreso. En los estacionamientos del Alto Las Condes, que ahora tiene un aforo para 9.565 compradores, se arma taco. El Apumanque, en tanto, si bien está abierto, no todas las tiendas toman el mismo camino. La afluencia, de hecho, es mayor en las afueras.
Las cordonerías en otro sector de Santiago se atiborran de personas que necesitan bastidores, agujas o telas. “Llevo un mes sin poder terminar mi bordado, que es mi única entretención entre tanto encierro”, confiesa Patricia Ojeda, una de las 11 personas que se cuentan esperando solo para ingresar a una tienda de géneros en Independencia.
Y en las peluquerías, otra vez, se escucha el sonido de las tijeras cortando cabello y a los restaurantes vuelve el ruido de platos y cubiertos. “Hacía falta despejarse, aunque sea un poquito”, responden casi al unísono Carlos y Juan, dos amigos que se juntaron a comer chacareros y completos acompañados de una cerveza cerca de Plaza Ñuñoa.
Los Dos Caracoles en Providencia y la Rampa de Las Flores en Las Condes reciben a varias personas que buscan obsequios en las joyerías o reparaciones en los servicios técnicos para celulares. “Vengo a comprar todos los regalitos que se me han ido acumulando”, confiesa Josefina.
A casi seis kilómetros de distancia, el Parque Metropolitano anuncia que reabre de manera continua dos de sus cuatro accesos (Pedro de Valdivia Norte, en Providencia, y Pirámide, en Vitacura), los cuales estarán funcionando de lunes a viernes, de 6.00 a 19 horas, y fines de semana y festivos de 6.00 a 9.30 en todos sus accesos. Pero no es todo, porque los rieles del teleférico también vuelven a ver acción, aunque solo en el tramo desde Estación Oasis a la Estación Cumbre, ya que la parada de Tupahue se utiliza para la sanitización de las cabinas.
“Estamos muy contentos de poder reabrir en horario extendido dos de nuestros cuatro accesos de Parquemet de lunes a viernes para personas de comunas que están en Fase 2. Hemos trabajado arduamente para que este espacio continúe siendo un lugar de encuentro con la naturaleza”, señala Martín Andrade, director del Parque Metropolitano de Santiago.
La respuesta de los colegios
“Recomendamos que los niños vayan al colegio en Fase 2 con todas las medidas de autocuidado”, señalaba en el reporte diario la subsecretaria Daza.
Más temprano, los recintos educacionales de las 10 comunas que pasaban a Fase 2 desde este jueves vivían todo tipo de situaciones. “El mundo municipal ha sido más reacio”, decía al respecto Raúl Figueroa, ministro de Educación, en radio Cooperativa. En total, según datos del Mineduc, 33 son los colegios (municipales, particulares o particulares subvencionados) en esas 10 comunas de la Región Metropolitana que desde este mismo jueves abren sus puertas a la presencialidad, mientras que según sus propias averiguaciones, varios otros lo harán desde el lunes, para dar tiempo a las comunidades para organizarse.
“Es una buena noticia que, cumpliendo todos los protocolos sanitarios, los alumnos puedan volver a encontrarse, sobre todo que ahora la seguridad se amplifica, considerando que el proceso de vacunación de los profesores ya está terminado”, expresa el titular de Educación.
En ese sentido, donde más estudiantes se ven es en los recintos particulares. “El colegio nos ha garantizado, igual que en la apertura anterior, que se cumplen estrictamente las medidas y como ya salió todo bien, como papás creemos que los niños deben retomar las clases, les hace bien”, dice José, apoderado del Verbo Divino de Las Condes. Casi al frente, en el Villa María Academy, se vive algo similar.
Pero el panorama es variado, incluso en comunas donde antes sí se volvió a clases presenciales. Por ejemplo, en Providencia, se tomó la decisión de no regresar hasta, al menos, después de las elecciones del 15 y 16 de mayo, por dos razones: varias instituciones son centros de votación y sus alumnos siguen confinados.
“Aunque nuestros establecimientos cuentan con todas las medidas sanitarias respectivas, hemos determinado continuar con las clases online, ya que más del 80% de nuestros estudiantes son de comunas que continúan en cuarentena”, explica José Antonio Tapia, director de Educación.
Mientras, al Colegio Leonardo Da Vinci, de la Corporación Municipal de Las Condes, llegan en total 40 estudiantes, los que pronto deberán volver a clases virtuales, de forma momentánea, puesto que el recinto será sede de las elecciones.
Y en las calle resuena, estrepitoso, un sonido olvidado en el último año: son los niños que gritan, juegan y corren en el patio del colegio. La cuarentena, al menos aquí, ha terminado.