Contagios de Covid-19 disminuyen en el país, pero los casos críticos aumentaron 46% el último mes
En la Región Metropolitana la situación es más compleja: el último mes los pacientes internados en las UCI por coronavirus crecieron un 71%. Según los expertos, factores como el desfase entre el diagnóstico y el requerimiento de internación, junto con el agravamiento de los síntomas, son algunos factores los que explican el fenómeno.
Un total de 25.008 casos activos de coronavirus en el país registró el Ministerio de Salud el 18 de enero pasado, cuando se alcanzó una de las cifras más altas de contagiantes desde la primera ola de la pandemia. Pero la cifra ha ido en descenso: ayer se reportaron 21.636 casos en fase de transmisión, anotando una baja del 13% durante el período.
Sin embargo, esta caída no se ha visto reflejada en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI). Muy por el contrario, la ocupación de camas destinadas a pacientes con coronavirus en estado crítico pasaron de 1.073 a 1.569 en apenas 31 días, lo que configura un crecimiento del 46%.
18 de enero | 18 de febrero | Variación | |
---|---|---|---|
Casos activos (nacional) | 25.008 | 21.636 | -13% |
Hospitalizaciones en UCI (nacional) | 1.073 | 1.569 | +46% |
Casos activos (RM) | 4.859 | 4.954 | +2% |
Hospitalizaciones en UCI (RM) | 423 | 723 | +71% |
A nivel de la Región Metropolitana, durante el mismo período los casos activos se mantuvieron relativamente constantes: de 4.859 a 4.954. Sin embargo, los pacientes Covid-19 internados en UCI crecieron violentamente, pasando de 423 a 723, es decir, un 71% de aumento.
El académico en Salud Pública de la Universidad de Santiago (Usach) y autor del análisis, Claudio Castillo, advierte que en este período, y con un proceso de vacunación que se ha desarrollado con éxito, “es importante que las autoridades puedan transmitir correctamente el riesgo; la pandemia no está bajo control o en retirada, la Región Metropolitana es un ejemplo de que los casos están al alza y las hospitalizaciones en UCI están en aumento constante desde hace varias semanas, por lo que las medidas de alto riesgo, como abrir cines, no se comprenden en esta circunstancias”.
Castillo también hace hincapié en que durante la segunda oleada de casos las internaciones se están concentrando en personas más jóvenes que, debido a la priorización del plan de inmunización, tardará más en ser protegida por alguna de las vacunas. El académico agrega que durante toda la pandemia, el grupo etario entre 18 y 49 años concentra la mayor cantidad de hospitalizaciones. “(Los casos) aunque son más jóvenes, están agravándose”, concluye.
Desfase de la evolución de la pandemia
Desde la Unidad de Paciente Crítico, el médico jefe en Clínica Indisa, Sebastián Ugarte, plantea que tal como ocurrió durante el primer brote, el peak de casos, difiere del peak de hospitalizaciones, pues los casos agravados demoran entre una semana a 10 días -desde el diagnóstico o los primeros síntomas- en llegar hasta las unidades críticas.
“Lo que ocurre es que el incremento de ocupación de las camas críticas es un indicador tardío. Desde el momento que una persona desarrolla los primeros síntomas hasta que se hospitaliza en UCI, pueden pasar siete días o más. Va desfasado y puede ir fácilmente desfasado dos semanas. Y es más: algunos pacientes ingresan a hospitalización básica y luego a cuidados críticos”, explica el intensivista.
En la proyección, Ugarte espera que “la disminución de casos que se vio en los días previos, o los números no tan elevados reportados durante la jornada de ayer, se va a notar en una o dos semanas más en las unidades”. Y agrega que “un segundo elemento a considerar es la estadía del paciente. Como hubo un aumento de los contagios con esta segunda ola, de la que ya estamos saliendo, los que se enfermaron y aquellos que hacen una forma más grave demoran en llegar a la UCI, también demoran cerca de dos semanas en salir. Actualmente tenemos poco margen de ingresos y egresos”.
Una tercera arista son los brotes asincrónicos que ha presentado el país, con sucesivas alzas en las regiones hacia el sur, y un gran incremento al norte. “En la RM el aumento de internaciones no ha sido solo en base a casos propios, sino que estamos recibiendo traslados de otras regiones que lo necesitan”, detalla el jefe de la UPC de Indisa.
El académico de la Escuela de Salud Pública de la U. de Chile Mauricio Canals proyecta que “lo que debiera suceder es que la curva de las UCI, retardada respecto del número de casos, evolucione positivamente en conjunto con los casos que se están informando a diario. Podría ocurrir que esta curva comience a bajar, que los casos activos vayan disminuyendo, y que todavía tuviéramos la acumulación de la respuesta retardada de las UCI al gran ascenso de casos de diciembre-enero y sus contagios, pues puede ser que recién estén llegando los pacientes de manera demorada. Si efectivamente están bien calculados los casos activos, debería ocurrir que en las próximas dos semanas las UCI también tengan una baja”.
El coordinador de las camas críticas del Minsal, el exsubsecretario Luis Castillo, confirma que “estamos viendo ingresos de pacientes más jóvenes, la edad promedio ha bajado y es de 58 años, y cada vez tienen más comorbilidades serias, severas. Por ejemplo: obesos que derivan en un coronavirus sistémico, es decir con afectación de varios órganos, además del pulmón”.
Sin embargo, sobre la mayor ocupación, coincide en que “un porcentaje de los casos, sintomáticos y asintomáticos van a requerir hospitalización entre siete a 15 días posterior al diagnóstico. Una cosa es el diagnóstico y otra el agravamiento de los síntomas. Eso explica que haya un desfase entre los casos activos y la curva de hospitalizaciones. Hoy por hoy, los egresos están prácticamente igual a los ingresos, pero con ingresos enlenteciéndose”, aclara Castillo.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.