Una serie de conversaciones han sostenido durante los últimos días un sector de la centroizquierda en la Convención Constitucional. El objetivo de los distintos diálogos es diseñar una estrategia conjunta para enfrentar un aspecto clave de la discusión del Reglamento que regirá al órgano: la ratificación del quórum de 2/3 para aprobar las normas de una nueva Constitución.

Las tratativas se dan en medio de la compleja semana que ha enfrentado la constituyente y su directiva presidida por Elisa Loncon (mapuche) y Jaime Bassa (Convergencia Social). Luego de que explotara el caso de Rodrigo Rojas Vade, el jueves se reencendió la tensión por los 2/3 que divide a la centroizquierda dentro del órgano. Esa jornada, los Pueblos Originarios, el Partido Comunista, la FRVS y Pueblo Constituyente (ex Lista del Pueblo) reclamaron por una supuesta “imposición” de ese quórum para la aprobación de algunas normas del Reglamento de Consulta Ciudadana y Participación Indígena, lo que obligó a suspender la sesión y aplazar la votación en general del Reglamento para este martes.

Ante la complejidad, además, el pleno acordó que se enviaran propuestas para solicitar un quórum diferenciado para algunos artículos del texto, las que tendrán que ser votadas antes de pasar al fondo de la discusión.

En ese contexto, durante los últimos días algunos dirigentes del Frente Amplio, el Colectivo Socialista, el Colectivo del Apruebo e Independientes No Neutrales iniciaron una seguidilla de gestiones con el fin de buscar una fórmula para asegurar la ratificación del quórum de 2/3 para la discusión constitucional.

La complejidad, dicen en esas coordinaciones, es que los convencionales que están por esa cifra no alcanzan a sumar los 103 votos necesarios para su aprobación. “No hay 2/3 para los 2/3”, ironizan algunos dirigentes.

Según quienes han tenido acceso a esas conversaciones, los dirigentes que han encabezado ese esfuerzo serían Guillermo Namor (INN), Fuad Chahin (DC), Ricardo Montero (PS) y Fernando Atria (FA), entre otros.

La idea sería impulsar que el artículo 94 del Reglamento que regula la votación de las normas constitucionales en el pleno se realice con mayoría absoluta, es decir, con el respaldo de 78 convencionales. Entre esos cuatro colectivos cuentan con 52 representantes, pero alcanzarían ese número sumando a los miembros de Vamos por Chile, quienes han defendido los 2/3 históricamente. La jugada también impediría que los constituyentes del PC, la FRVS, PP. OO. y Pueblo Constituyente cuenten con los votos necesarios para impedir que se ratifique ese quórum.

Sin embargo, para hacer eso, primero tendrían que rechazar la propuesta de votación que presentó la derecha. En ese documento -el único que fue presentado a la directiva- se plantea que una serie de normas del Reglamento se voten con un quórum de 2/3, incluyendo el nombrado artículo 94.

No obstante, algunas voces del sector advierten que la jugada podría representar un “riesgo” y que sería mejor buscar la construcción de los 2/3. Para evitar eso, algunos convencionales aseguran que también habrían sostenido conversaciones con dirigentes de derecha.