Será este miércoles a las 15 horas cuando la UDI se hará presente en una nueva sesión de la mesa técnica de pensiones, convocada por el gobierno. Una asistencia que se produce luego de que Giorgio Jackson (RD) renunciara a Desarrollo Social, lo que ayudó a descomprimir las tensiones entre el oficialismo y la oposición.

Fue el 24 de julio cuando el gremialismo anunció que se bajaba de la mesa de pensiones. Ese mismo día, su presidente, el senador Javier Macaya, había condicionado cualquier diálogo con La Moneda a la salida de Jackson, pero tras la renuncia de este último la oposición cambiará el tono. Así, apuestan a retomar el diálogo con el Ejecutivo, pero mantendrán una línea fiscalizadora en la que apuntarán a otras autoridades del Ejecutivo: la directora de la Dirección de Presupuestos (Dipres), Javiera Martínez (RD) y también el ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes (PS).

Hasta ahora, la estrategia se ha volcado en demostrar que seguirán participando de diálogos que contribuyan al país, pero que no estarán dispuestos a transar en aquellas reformas con las que no estén de acuerdo. Así lo transmitió el propio Macaya este domingo. “Para que el diálogo tenga sentido y empatice con lo que piensa Chile, hay un paso que debe dar el gobierno: cambiar sustancialmente los malos proyectos refundacionales de la reforma que ha sustentado”, dijo el timonel gremialista.

De hecho, hay temas en que existirá fricción -como la repartición de los seis puntos adicionales en la reforma de pensiones- pero ya se han dado mayores señales de acercamiento. Por ejemplo, en la derecha dicen que hay más ánimo para asistir a la reunión de pacto fiscal del gobierno, convocada para este 24 de agosto.

“Nosotros como partido tenemos que honrar nuestra palabra. Dijimos que mientras esté Jackson en el gabinete no conversábamos. Ahora se fue y nuestra disposición es a estar presentes”, sostuvo el diputado UDI de la Comisión de Trabajo, Henry Leal. A esa instancia el gremialismo no solo irá con sus parlamentarios, sino que acudirán con sus asesores.

También ha habido otros gestos de lado y lado. Este lunes, el timonel de RN, Francisco Chahuán, dijo en CNN Chile que conversó por teléfono con el Presidente Gabriel Boric. “Me llamó por teléfono. Conversamos largamente con el Presidente justamente por las reformas estructurales”, dijo. Para este jueves, de hecho, el gobierno invitó a las directivas de Chile Vamos a un encuentro para discutir las reformas, lo que se produjo luego de contactos del ejecutivo a los timoneles de los partidos.

“Hay personas como la directora de Presupuestos que se transforman en un obstáculo para tramitar la ley de presupuestos que ya se comenzó a discutir (...) Yo sería más prudente en el gobierno y buscaría su salida para que no se transforme en un tema de discusión que nada tiene que ver con la Ley de Presupuestos. Generar un punto de conflicto sería un error. Removerla a la brevedad sería una buena receta”, indicó el jefe de bancada de RN, Frank Sauerbaum.

Justamente Martínez se ha convertido en el nuevo foco de la derecha. A ella buscan responsabilizar por lo que la oposición considera una “flexibilización” del Presupuesto que presuntamente permitió que se aprobaran algunas de las cuestionadas transferencias desde entidades públicas a fundaciones.

En esa arremetida, toda la derecha apunta al mismo objetivo debido a que a Martínez la ven como parte del núcleo del gobierno. Es militante de RD, fue cercana al núcleo de campaña de Boric, y uno de los principales involucrados del caso -Daniel Andrade de Democracia Viva- dijo que fueron pareja.

De hecho, la idea en el Partido Republicano es seguir con su arremetida judicial. Esto, luego de que se ampliara la querella de los diputados republicanos Juan Irarrázaval y Cristián Araya, en contra de Jackson, Martínez y el jefe de asesores del Segundo Piso, Miguel Crispi.

“Giorgio Jackson no era una moneda de cambio. Es el desde. Nuestro trabajo de fiscalización va a continuar más firme que nunca. La directora de la Dipres tiene que ver una arista que es penal. La justicia aún tiene que ver si existe o no algún delito”, indicó el diputado republicano Mauricio Ojeda.

Contra Martínez la UDI además prepara una serie de oficios para indagar más en su rol, mientras que la bancada RN elaboró un estudio de lo que consideran las “fallas” de la directora de la Dipres.

Parte de la arremetida opositora además volverá a apuntar al ministro Montes. El 4 de julio, el Partido Republicano había anunciado el inicio del estudio de antecedentes para una posible acusación constitucional en contra del secretario de Estado. En la colectividad continuarán en esa línea y no descartan un posible libelo.

En otros partidos también buscan endosarle la responsabilidad al ministro socialista. Desde la bancada de diputados de RN, de hecho, ya han ingresado dos requerimientos a la Contraloría cuestionando su gestión. Uno por ausencia de haber denunciado los delitos dentro del plazo legal, y otro por falta de fiscalización en las competencias delegadas a los seremis.

“El gobierno debe entender que más allá de la disposición al diálogo, acá hay responsabilidades concretas que se debe perseguir. No podemos seguir adelanten sin despejar la responsabilidad que en ello le caben, entre otros, al ministro montes y a la directora de Presupuestos”, señaló la subjefa de bancada de RN, Marcia Raphael.

Otro de los hitos de fiscalización los buscan remarcar en la comisión investigadora de la Cámara Baja. Ahí invitarán tanto a Montes como a Martínez.