Hasta ahora, si nada altera el escenario epidemiológico, el gobierno optará por no renovar el Estado de Excepción Constitucional vigente desde el 18 de marzo de 2020 en todo el territorio nacional. Así lo hicieron saber distintos personeros de La Moneda, como el ministro del Interior, Rodrigo Delgado, quien a inicios de esta semana afirmó que “la situación ahora es distinta y eso hace pensar que a lo mejor no fuese necesario recurrir a esa instancia”.

Incluso, el mismo ministro de Salud, Enrique Paris, señaló que “si las cifras muy adecuadas que mantenemos hasta el momento se mantienen en el tiempo, lo más probable es que no se renueve el estado de excepción y que tampoco se mantenga el toque de queda”.

Así, a 13 días de que se cumpla el plazo y se levanten varias de las restricciones impuestas por la medida de rango constitucional -como la restricción de circulación nocturna-, el Presidente Sebastián Piñera ya requirió que los equipos del Segundo Piso de La Moneda y de la División Jurídica de Salud “reformulen” el plan “Paso a Paso”, vigente desde mediados del año pasado y modificado a inicios de julio de 2021.

De hecho, ayer la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, afirmó que “estamos trabajando en un nuevo ‘Paso a Paso’ en el caso de que este estado de excepción no se vuelva a renovar y (para), obviamente, tener herramientas desde el punto de vista de la salud pública para poder restringir algunas actividades”.

En ese contexto, Paris confirmó a La Tercera que el lunes, en reunión en La Moneda, serán revisados los cambios que se deberán adoptar. Aunque ya existió una primera cita, a inicios de esta semana entre las carteras de Salud, Economía, Interior y los asesores de Palacio para ese objetivo.

Preliminarmente, el análisis que comparten en Salud y La Moneda es que sin el estado de excepción vigente, muchas de las medidas establecidas hasta ahora no son legalmente practicables, sobre todo las que restringen la movilidad.

Un punto que está claro al menos para las autoridades sanitarias es que fases completas del plan “Paso a Paso” -como la Cuarentena o Transición- desaparecerían junto al toque de queda, tal como lo confirmó Daza. Sin embargo, explican que la alerta sanitaria vigente sí permite los aislamientos individuales de los infectados y la trazabilidad de los casos.

¿Podrían establecerse cuarentenas generales o por zonas? “Teóricamente sí”, señalan los abogados del gobierno, pues las facultades que contiene la alerta sanitaria son “extremadamente amplias”. De hecho, un punto del ya citado texto legal establece que, eventualmente, se puede “denegar la entrada en las zonas afectadas por el nuevo coronavirus 2019 a las personas no afectadas”, y lo anterior podría interpretarse como la facultad de un cierre temporal de una comuna o región.

El problema, explican, es que en contexto de pandemia, los tribunales han sido “benevolentes” con causas o requerimientos que tengan que ver -por ejemplo- con infracciones a las medidas sanitarias. Y por ahora, hay cierto consenso que, al menos de aquí a marzo del otro año, no sería necesaria una nueva cuarentena. Si se requiere, la proyección es que ya será un problema de la próxima administración.

Tanto en La Moneda como en el Minsal aseguran que los aforos pueden ser controlados por la alerta sanitaria y en ese caso en particular, las medidas establecidas hasta ahora -en restaurantes, bares, cines y otros sitios similares- se mantendrían.

De hecho, dos disposiciones de dicho documento los regulan: “Ordenar la utilización de mascarillas y otros dispositivos médicos afines en el transporte público, salas de clases, lugares de trabajo y, en general, en cualquier otro lugar de acceso público o donde exista aglomeración de personas”, y “disponer de las medidas necesarias para evitar aglomeraciones de gente en espacios cerrados o abiertos que puedan fomentar la propagación del virus”.

En ese sentido, que se siga fiscalizando el porte del Pase de Movilidad será clave en los lugares públicos. Así, la definición es si durante la próxima semana, cuando se ultimen estas modificaciones, se cede a los anhelos del Ministerio de Economía de aumentar la cantidad de personas que pueden estar en determinados lugares.

Personeros de Salud, en privado, explican que “nosotros entendemos que con la alerta sanitaria lo único que no pueden existir son las restricciones generales de movilidad. Todas las otras materias, como aforos, contratación de personal extra, adquisiciones directas, sí. Por lo tanto, las fases (de Preparación hacia arriba) debieran mantenerse, o incluso ampliarse”.

Ayer, de hecho, la subsecretaria Daza complementó que “hace unos meses nos parecía muy lejana la posibilidad de que prácticamente todo nuestro país estuviera en Fase 4″. Por ello, en la última actualización del plan “Paso a Paso” no se incluyó una Fase 5. “Sin embargo, ahora con la situación del país, sí están las condiciones para pensar en un paso más”, agregó.

Hasta ahora, todo indica que sin la posibilidad de mantener la Fase 1 y 2, se establecerían tres etapas.

La lectura que realiza el abogado y profesor de Derecho Administrativo de la U. de Chile, Luis Cordero, es distinta a la que realizan en el gobierno. El académico asevera que, incluso con el estado de excepción vigente, la mayoría de las disposiciones sanitarias “ha funcionado en base a la alerta sanitaria”, lo que podría continuar si las autoridades sanitarias así lo establecieran.

“Todas las medidas adoptadas en el contexto de la pandemia, a excepción de la movilización de las Fuerzas Armadas, no tienen su origen en el estado de excepción, sino que en la alerta sanitaria. El mejor ejemplo de eso es que no son dictadas por decreto del Presidente, sino que por resoluciones del Ministerio de Salud”, explica.

Como ejemplo, Cordero explica que en contexto de estado de excepción, el toque de queda solo puede ser dictado por el Presidente o el jefe de zona. Sin embargo, el abogado detalla que cada vez que ha sido decretado, “ha sido como medida de aislamiento sanitario, que es lo que la alerta sanitaria permite. El Código Sanitario contiene normas amplísimas, tú podrías gobernar el país en base al Código Sanitario”.

Por ello, el académico puntualiza que en las sucesivas renovaciones que tuvo la medida constitucional se argumentó que “había medidas que no podían adoptarse sin el Estado de Excepción Constitucional, lo que no es así”.