A toda máquina trabajó el gobierno desde la semana pasada para definir la fórmula que aplicará para extender el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), anuncio que tendría lugar hoy. Esto, porque el objetivo es darlo a conocer antes de que se comience a discutir el proyecto de ley que busca impulsar un cuarto retiro del 10% de los fondos de pensiones. Dicha sesión está agendada para este miércoles 11 de agosto, día que la Comisión de Constitución de la Cámara fijó para iniciar el debate.

De acuerdo a fuentes de La Moneda, el tema se trató intensamente en el comité político ampliado de este lunes, y en esa instancia la idea que transmitió el gobierno fue que la comunicación se haría este martes, si bien advierten que nunca se puede descartar una modificación de última hora.

En Teatinos 120 se seguía trabajando hasta el cierre de esta edición en la fórmula definitiva de las medidas, pero personeros del Ejecutivo señalan que durante la tarde se apuntaba a extender el IFE a todo septiembre, hoy solo rige 50% del beneficio para dicho mes, y hasta octubre. Los montos a entregar van entre $177.000 y $887.000, según la cantidad de integrantes del hogar. Por ejemplo, un hogar de tres integrantes recibe $400.000 y un hogar de cuatro integrantes $500.000. Así fue durante junio, julio y agosto, y en septiembre era la mitad de eso. Sin embargo, trascendió que el oficialismo seguía presionando porque el programa se extendiera hasta fin de año.

Hay que considerar que actualmente el costo del IFE universal es del orden de 1 punto del PIB por mes, eso es cerca de US$3.200 millones mensuales, por lo tanto, extenderlo completo hasta diciembre representaría cerca de US$10.000 millones adicionales. En cambio, por lo que resta de septiembre y octubre ascendería a unos US$4.800 millones. Por ello, además, se insiste en Palacio, el diseño debe considerar cómo comenzar a retirar este IFE para pasar a uno para incentivar la contratación, lo que se ha conocido como un IFE laboral.

La definición del gobierno es que se debe mantener el IFE universal, pero por un plazo acotado de tiempo, porque no es sustentable para las cuentas fiscales extenderlo por muchos meses más. Además, en el Ejecutivo tienen claro que el foco ahora debe ser el empleo, por lo que también se trabaja en un instrumento para potenciar el empleo.

Ese anuncio, de un IFE laboral o de nuevos subsidios al empleo va por un carril paralelo a la extensión del IFE universal. Hasta ahora lo que se conoce es que el plan consistirá en pasar de subsidios centrados en la demanda, a otros en la oferta; es decir, directo a los trabajadores.

La comisión de expertos para el mercado laboral entregó algunas pistas de la magnitud de los cambios que se podrían implementar. En su informe preliminar entregado el viernes pasado, recomendaron al gobierno incrementar significativamente el monto del subsidio al nuevo empleo -como transferencia directa a las personas que se emplean-, para llevarlo al 50% de la remuneración mensual en el caso de los hombres, con un tope de $250 mil (actualmente es de $50 mil) por hasta 3 meses, que pueden ser extendidos 3 meses más en función de las condiciones sanitarias. Y en el caso de las mujeres, jóvenes, personas mayores de 55 años y personas con discapacidad, subirlo desde los $70 mil al 80% de la remuneración mensual, con un tope de $350 mil (actualmente es de $70 mil) por hasta 3 meses, que pueden ser extendidos 3 meses más en función de las condiciones sanitarias. De acuerdo a la Comisión, el costo fiscal ascendería a US$ 420 millones considerando un período de agosto a diciembre.