Las pesimistas perspectivas para el desempeño de la economía, y que apuntan a una recisión en los próximos meses, ya han comenzado a reflejarse en las cifras. Según informó este lunes el Banco Central el Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec) anotó una variación nula en agosto frente a igual mes de 2021.
Así el indicador tuvo su peor desempeño desde febrero de 2021 cuando se contrajo 2,8%. Sin embargo, la cifra fue mejor a las expectativas del mercado que esperaba un retroceso de 1,5%, de acuerdo a un sondeo de Bloomberg.
La serie desestacionalizada aumentó 0,6% respecto del mes precedente, versus el descenso de 0,7% que proyectaban los analistas, y no exhibió variación en doce meses. El mes registró la misma cantidad de días hábiles que agosto de 2021.
El resultado del Imacec se explicó por el crecimiento de las actividades de servicios, compensado por las caídas de la minería y el comercio, señaló el instituto emisor.
Por su parte, el crecimiento del Imacec en términos desestacionalizados fue determinado por el desempeño de los servicios, en particular de educación.
El Imacec no minero presentó un crecimiento de 1,3% en doce meses, mientras que en términos desestacionalizados, lo hizo en 0,7% respecto del mes anterior.
Pese a este mejor comportamiento al esperado, los economistas anticipan que no cambia la perspectiva de caída para los próximos meses, pero sí alienta a que el año en su conjunto termine por sobre lo previsto con un Producto Interno Bruto (PIB) que podría superar el 2%, tal como lo espera Hacienda (ver página 2-3).
En Santander afirmaron que “la gran sorpresa estuvo en servicios, que tuvo un rebote muy sustantivo debido a la recuperación de los servicios educacionales, producto de una mayor presencialidad”. Misma visión tiene Scotiabank quienes indicaron que “hubo una recuperación en Educación y Servicios Empresariales, pero ambos de carácter transitorio”.
No obstante, en Santander prevén que “el consumo seguirá contrayéndose, por lo que el comercio mantendrá su caída. La sorpresa del sector servicios es de carácter puntual y no debiese incidir en la dinámica de este sector, el que seguirá presionado a la baja por menores ingresos laborales”. Así, acotan que “debido a la sorpresa de agosto, corregimos nuestra estimación para el crecimiento del año desde 1,75% hasta 2%, en línea con la última estimación del Informe de Política Monetaria de septiembre”.
Y para Scotiabank la economía continúa mostrando desaceleración y contracción en el margen. “El crecimiento trimestral móvil desestacionalizado mantiene por tercer trimestre consecutivo una contracción que incluso se acentúa en el margen. Con esto, y también como parte de nuestro escenario base, deberíamos tener una recesión técnica el cuarto trimestre de 2022″.
En Inversiones Security sostienen que si bien el Imacec sorprendió́ de manera positiva, “seguimos previendo que la actividad económica continuaría desacelerándose en los próximos trimestres, debido en gran medida al deterioro de las condiciones financieras externas en lo más reciente, en un contexto de elevada incertidumbre local”.
En Bice Inversiones el Imacec de agosto “no representaría un importante cambio en la tendencia negativa de la economía local”. De esta manera, añaden que “a partir de los siguientes meses veremos señales más claras de recesión, donde los factores de incertidumbre locales e internacionales continúan presentes”. Así, de acuerdo a su análisis, en términos de variación a doce meses, “se registrarían cifras negativas hasta mediados del próximo año. Con todo, estimamos que el PIB registraría un crecimiento en torno a 2,0% este año y una caída cercana a -0,9% el 2023″.
Para Nathan Pincheira, economista jefe de Fynsa, de manera preliminar, “estimamos una variación de Imacec en septiembre entre -2% y -1,5%, convirtiéndose, ahora sí, en la primera de una serie de variaciones negativas que “pronosticamos se pueda extender hasta el tercer trimestre de 2023. Para Pincheira “mantenemos nuestra proyección para el año entre 1,5% y 2,0%, mientras que hacia 2023 el PIB decrecería entre -1,5% y 0,5%”.
En tanto, Ricardo Consiglio, economista jefe de Zurich Chile AGF, comenta que “si bien esta es una buena noticia, las expectativas hacia adelante siguen siendo complejas, con una economía que continuará con su proceso de ajuste entrando próximamente en recesión, impulsada por una política monetaria restrictiva, los altos niveles de inflación y el deterioro de las condiciones externas”.
Qué pasó en el mes
El Banco Central detalló que la producción de bienes cayó 1,8%, resultado explicado por el desempeño de la minería y la industria, que presentaron disminuciones de 7,5% y 3,3%, respectivamente. En contraste, el resto de bienes presentó un crecimiento de 4,1%. En términos desestacionalizados, la producción de bienes no presentó variación respecto del mes anterior.
Mientras que el comercio, tuvo una disminución de 10,5%, resultado explicado por el comercio minorista y mayorista. En el primero destacaron las menores ventas en grandes tiendas, y en el segundo, la caída en las ventas de maquinaria y equipo. En tanto, las cifras desestacionalizadas mostraron una caída de 2,1% respecto del mes precedente. Y los Servicios
Los servicios crecieron un 4,4%, resultado explicado por el desempeño de los servicios personales, en particular de educación. También destacó el aporte del transporte y los servicios empresariales. Acorde con cifras ajustadas por estacionalidad, las actividades de servicios presentaron un crecimiento de 1,9% respecto del mes anterior. Este resultado fue incidido por la recuperación de los servicios de educación.