Arturo Vidal y Colo Colo vuelven a encontrarse. El retorno del Rey al club que lo formó está un poco más cerca, aunque aún no está cerrado. Una versión que reafirman desde el entorno del jugador y también desde el seno del directorio de Blanco y Negro: hubo avances en las últimas horas, pero todavía falta. De ambos lados piden paciencia, porque aún restan algunos detalles importantes como, por ejemplo, ponerse totalmente de acuerdo en las cifras y en la extensión del vínculo, junto con ciertas cláusulas específicas. Eso sí, los albos subieron la puntería. El acercamiento ocurre un día y medio después de que el mediocampista rechazó con molestia y de forma categórica la primera oferta de los albos por su fichaje, por considerarlo insuficiente: US$ 800 mil anuales y contrato por un año, con condiciones. Y cómo no, si Vidal aspiraba prácticamente al doble, tanto a nivel salarial como de extensión del vínculo.
Eso sí, a los albos les quedaba margen para incrementar la propuesta, de acuerdo a los rangos que se habían establecido en la reunión ampliada de la Comisión Fútbol en la que, finalmente, participó el pleno del directorio de la concesionaria que administra al Cacique. En esa instancia también se adoptó una decisión clave: comisionar y, en definitiva, empoderar al gerente general Alejandro Paul para que asumiera un rol protagónico en las negociaciones, en desmedro del gerente deportivo, Daniel Morón. La estrategia no es meramente simbólica: el alto funcionario conoce profundamente las posibilidades financieras del club, de las que ByN no se quiere apartar pese al entusiasmo generalizado que produce el arribo del King. Y claro, la billetera apremia y urgen refuerzos en otras posiciones.
Los números
La oferta alba toma una forma más parecida a las pretensiones de Arturo Vidal. De hecho, llegó a US$ 1 millón anual, aunque esta vez por dos temporadas. La duración del contrato era una de las prioridades del Rey. En ByN tuvieron muchas dudas al respecto. De hecho aún las tienen. Se intentó ofrecerle un año con una cláusula de renovación del 50% de los minutos. El acápite estaba relacionado con la principal aprensión del bloque directivo que inicialmente se mostraba más reacio a reclutarlo: su condición física. El antecedente más concreto que hacía dudar a esos accionistas es que Vidal no ha jugado desde septiembre, cuando se rompió el menisco externo de la rodilla derecha, en el duelo de la Selección frente a Colombia.
De hecho, aún con un pacto económico virtualmente cerrado, en la concesionaria siguen poniendo el énfasis en la exhaustiva revisión médica a la que Vidal debe someterse antes de firmar el contrato. Si bien el trámite forma parte del protocolo habitual que antecede a los fichajes, en ByN le han dado una relevancia fundamental: la interpretación es que no incurrirán en una inversión millonaria en un jugador por el que deban esperar demasiado.
Vidal, de todas formas, se ha encargado de transmitir señales de tranquilidad: en sus cuentas en las redes sociales se ha mostrado realizando exigentes rutinas junto a Juan Ramírez, su preparador físico personal. También volvió a jugar, en un duelo de la Sub 23 ante un combinado de jugadores del Sifup. Si el plano físico funciona de acuerdo a lo proyectado, la puesta a punto futbolística será apenas un mero trámite, considerado su jerarquía.
A través de una emisión en su canal de Twitch, el Rey comentó cómo va el proceso de negociaciones para arribar al Cacique. Fue cauto, pero optimista. “Mientras no firme, no hay nada concreto. Estamos en negociaciones, todo el mundo lo sabe. Estoy feliz, pero estamos en esa, avanzando”, sintetizó. “Estamos avanzando bien, todavía no se sabe. Mientras no firme, no está claro. Se han visto tantas cosas... de verdad, a esta fecha, con esta edad, no confío en nadie”, aterrizó.
De igual forma, reconoció que el camino ha sido complejo. “No es fácil llegar a acuerdo. Hay cosas que se deben ir afinando. Del 1 al 100, está a un 70%. Me va a retar Fernando (Felicevich), ja ja. Faltan algunos detalles, la firma pesa 20% y los otros 10% detallitos y listo. No quiero que se aprovechen del otro lado”, estipuló. De hecho, sus palabras fueron las señales más concretas que se han conocido en el transcurso de la negociación.
“Las negociaciones se demoran, son así. En la tarde esperando a ver cómo se mueve todo. Mientras no firme no hay nada concreto, pero estoy feliz y tengo que decirlo, estamos avanzando. Ojalá se dé, estamos todos esperando el momento, expectantes”, insistió.
También se permitió un nuevo guiño a Jorge Almirón, a quien ya había elogiado en su habitual estilo (”Es máquina”, dijo). “Me gusta Almirón, he visto su carrera, no cualquier técnico llega a una final de Libertadores. Creo que a Colo Colo le va a ir bien con un entrenador así”, planteó. Hace algunos días, el nuevo DT de Colo Colo y Vidal compartieron unos minutos en Juan Pinto Durán. Después de reunirse con los jugadores Sub-23 de Colo Colo que forman parte de la nómina para el Preolímpico que se disputará en Venezuela, tuvo un encuentro con el Rey, quien se encontraba allí entrenando con el objetivo de ponerse a punto físicamente. El estratega también había puesto su parte. “¿Qué entrenador podría prescindir de la jerarquía de Vidal? Pero soy cauto en eso. Sé la trayectoria, lo que representa en la historia y para el hincha. Si está en condiciones, claro que sí. Si quiere venir, no soy yo quien le va a cerrar la puerta. Si viene y es lo que siempre ha sido en su carrera, espectacular para todos”, comentó.
Finalmente, Vidal le agradeció al América de Cali por su interés en ficharle. “Estuve muy cerca, lo agradecí al presidente. Me buscaron, se la jugaron al máximo, no se llegó. Estaba muy ilusionado, pero Colo Colo es mi corazón”.