De aquí en más, Eduardo Berizzo se la pasará rindiendo pruebas. Este lunes, de hecho, empieza a afrontar un examen decisivo: la Roja debutará en los Juegos Panamericanos. Ante México, el equipo nacional debe comenzar a cimentar el camino hacia una medalla en la cita continental. Esa es la meta que le impuso la dirigencia que preside Pablo Miald al técnico de la Roja.
Además, su escuadra debe ofrecer una buena imagen. Esa es, de hecho, una de las grandes deudas que ha dejado en su gestión en el combinado adulto. La otra es la escasez de contundencia ofensiva, que se ha traducido en un débil inicio en las Eliminatorias, el gran desafío para el que fue contratado.
Con todo
Ante los aztecas, Berizzo dispondrá de un contingente altamente ofensivo. De hecho, variará su propuesta táctica para disponer un tridente ofensivo que, a priori, ilusiona: lo integran Alexander Aravena, a quien ya ha incluido en la Selección, Damián Pizarro, referencia ofensiva de Colo Colo, y Maximiliano Guerrero, el único representante de la Primera B en el listado, quien se ganó el puesto por sus actuaciones en Deportes La Serena.
El estratega utilizará a dos de los jugadores mayores de 23 años a los que convocó: Brayan Cortés y Matías Zaldivia. En el mediocampo, prescindió del colocolino César Fuentes, el otro futbolista que excedía el límite, aunque formaba parte de la excepción autorizada por las bases del certamen.
Así, el técnico nacional mandará al campo de juego a Cortés; Loyola, Zaldivia, Villagra y Daniel Gutiérrez; Pizarro, Canales y César Pérez; Guerrero, Damián Pizarro y Alexander Aravena.