“Si me trabo, perdonen”, comenzó diciendo Diego Buonanotte. El Enano tenía preparada una carta de despedida, pero apenas pudo leerla. La emoción desbordaba al ídolo de Universidad Católica, mucho antes, incluso, de encender el micrófono. Hasta que su voz resquebrajada confirmó su adiós del equipo de la franja, el club que fue su casa durante los últimos seis años y aquel donde encontró su lugar en el mundo, como tantas veces confesó. Su nuevo destino será Sporting Cristal.
“Buenas tardes a todos. Primero que nada, quiero agradecerles por estar acá y acompañarme hoy. Siempre es difícil decir adiós, sobre todo, después de vestir durante seis años y con mucho orgullo la camiseta de la que siempre será mi querida Universidad Católica. Entregué lo mejor de mí, desde el primer día que llegué y eso se lo debo especialmente al apoyo y al cariño que recibí de parte de los cruzados y las cruzadas, a los que llevaré siempre en mi corazón. Mi familia y yo los sentimos muy cerca. Me hicieron sentir como en casa siempre, en cada partido, en cada toque de balón, en cada asistencia, en cada gol y en las nueve vueltas olímpicas que pudimos dar. Siempre sentí el cariño y cercanía de cada uno de ustedes. Hicimos historia juntos y eso es algo que nunca olvidaré”, dijo, a duras penas, el pequeño volante, multicampeón con la UC.
“Toca lo más difícil: la despedida, prepararse para una nueva etapa. Quiero agradecerle a todo el pueblo chileno. Me enseñaron que no importan los colores. Cada uno de ustedes me trató siempre con mucho respeto y cariño. Por último, gracias a la enorme hinchada cruzada, a mis compañeros, directores técnicos, directiva y empleados del club por el tiempo compartido y todo lo vivido. Siempre juntos. Los quiero mucho”, concluyó Buonanotte, entre lágrimas.
Luego, el mediocampista nacido en River recibió de parte de Juan Tagle, presidente de Cruzados, y José María Buljubasich, gerente deportivo, una camiseta firmada por todos los jugadores del plantel. Varios de ellos estuvieron presentes en la sala de conferencias del complejo Raimundo Tupper, como el capitán José Pedro Fuenzalida, Nicolás Peranic y Raimundo Rebolledo. En el lugar también estuvo su familia acompañándolo..
“No es un momento fácil para nadie. Sabemos lo que Diego quiere al club. Siempre es difícil decir adiós. Esto es fútbol y todo jugador quiere jugar. No es una decisión fácil. Esta es tu casa y las puertas del club siempre van a estar abiertas. Te deseo lo mejor y que la nueva etapa sea exitosa”, dijo el Tati.
Mientras que Tagle, timonel de la sociedad anónima, también le dedicó un mensaje de despedida a Buonanotte. “Soy el presidente de Cruzados, pero también soy muy hincha de Católica, y quiero representarlos a todos para agradecerle todo lo que hizo Diego vistiendo la camiseta del club. Creo que nadie imaginaba lo que iba a significar la llegada de Diego, en 2016. Esto nos toma a todos por sorpresa. Surgió en los últimos dos o tres días. Me sale difícil a mí ser el intérprete de ese caudal de cariño de los hinchas, que va más allá del fútbol. En el caso de Diego, se extiende a su familia. No puedo expresar de mayor manera el cariño que los cruzados te tienen. Esta es más que tu casa. Darte agradecimiento por estos seis años en Católica. Encontraste tu casa y eso nos pone orgullosos”, dijo el abogado.