El tenista Novak Djokovic, número 1 del ránking ATP, compró el 80% de una compañía farmacéutica danesa para desarrollar tratamientos contra el coronavirus. La transacción se conoce luego de que el deportista fuese deportado de Australia por no estar vacunado contra el Covid-19.
Según informó Reuters, el serbio de 34 años, ganador de 20 Grand Slam, entre los que se incluyen nueve Australian Open, adquirió la mayor parte de la propiedad de la empresa de biotecnología QuantBioRes, cuya sede se encuentra en Dinamarca.
El CEO de la farmacéutica, Ivan Loncarevic, comentó que la adquisición del 80% del capital por parte de Djokovic se produjo en junio de 2020, aunque se negó a revelar el monto de la operación que convirtió a la raqueta europea en el máximo accionista.
La negociación sale a la luz pocos días después de que Australia le revocara la visa y expulsara al tenista, que no pudo participar del primero torneo grande de la temporada. Pese a que había recibido una exención médica para ingresar al país sin estar vacunado, las autoridades no encontraron válidos los argumentos por los cuales se le otorgó dicho permiso, por lo que fue expulsado. Para colmo, se le prohibió el ingreso por los próximos tres años.
Desde el entorno de Djoker ha trascendido que estudia demandar al estado australiano por el trato recibido y por el daño que, supuestamente, le causaron a su imagen. Una cuestión que además le ha traído problemas con sus auspiciadores.
La pesadilla del serbio, máximo ganador del Abierto de Australia, está lejos de terminar, ya que desde Francia anunciaron que no se le permitirá participar el segundo Grand Slam de 2022, Roland Garros, si es que no tiene el esquema de vacunación completo. Y lo mismo puede sucederle en el segundo semestre, cuando se dispute el US Open, debido a las leyes de Estados Unidos.