¿Qué sería del fútbol sin sus hinchas? ¿Sin esos fanáticos que apoyan al equipo de sus amores, pese al esfuerzo económico que eso implica? Porque la pasión muchas veces choca con el bolsillo.
Así ocurre en todas partes. En Chile, por ejemplo, adquirir un ticket se ha vuelto cada vez más complejo. Y aunque hay equipos que han mantenido los valores que tenían antes de la pandemia, otros los aumentaron, golpeando las finanzas de sus fieles.
Una problemática que generó una violenta manifestación de hinchas de la U contra Azul Azul, en la previa del partido ante La Calera. Sin embargo, ¿cuánto cuesta ir al estadio en el fútbol chileno? El Deportivo realizó un catastro al respecto y estos fueron los resultados.
El coronavirus y la inflación
El Covid-19 fue un cachetazo para la economía de los clubes, ya que dejó vacías las tribunas, cuando justamente la asistencia de público es uno de los mayores ingresos.
Desde agosto de 2020 hasta mediados de 2021 no hubo hinchas en las tribunas. Eso provocó que muchos se vieran en la necesidad de subir las entradas cuando las autoridades permitieron el regreso de los simpatizantes al estadio.
La inflación en Chile es otra realidad que impacta en el ámbito deportivo. Actualmente, en la Primera División, las entradas cuestan, en promedio, $ 16.000; mientras que en la Primera B, $ 11.000. Si se consideran ambas, el monto general de un ticket en Chile es de $ 13.500, sin considerar los cargos por servicio que cobran algunas empresas. En cada uno de los casos anteriores, se contemplaron todos los sectores.
Presenciar un partido de la máxima categoría es, en promedio, $5.000 más caro que ver uno de la B. Eso sí, estos precios varían cuando se trata de duelos de alta convocatoria o torneos internacionales, donde suelen aumentar los costos.
Si se compara por zona, las galerías tienen un promedio de $ 7.000 en Primera y de $ 4.600 en la B. La tónica se mantiene en las tribunas ($ 11.600 contra $ 7.600); codos ($ 18.000 versus $12.000) y preferenciales ($ 28.500 vs. $ 21.000).
Rangers y Melipilla destacan
Las entradas más baratas están en el Ascenso. Deportes Melipilla tiene las galerías de menor precio en el profesionalismo ($ 3.300), seguido muy de cerca por Rangers ($ 3.500). En ese mismo torneo, la entrada más cara es de Cobreloa: $ 42.000 por un ticket VIP.
En Primera, la galería más barata la ofrece Unión Española ($ 4.000) y Universidad Católica la de mayor costo ($ 12.500, en duelos clase A, con un descuento que bordea el 25% para los socios). Ambos conjuntos presentan las entradas más caras de la liga, con zonas preferenciales que cuestan $ 50.000 y $ 70.000, respectivamente, para partidos de mayor demanda.
La galería de la U oscila entre los $ 6.500 y $ 11.000; mientras que la preferencial bordea los $ 26.500. Por su parte, Colo Colo vende su ticket de menor precio a $ 7.000, y el mayor a $ 30.000, en promedio, con alzas específicas para duelos de clase A, como los internacionales.
Juan Tagle, presidente de Cruzados, asegura que los precios de las entradas de la UC están por debajo de la inflación. “No me consta que tengamos las galerías más caras. Muchas veces en galería visita nos han cobrado mucho más que lo que cobramos nosotros. Las alzas de nuestras entradas han ido por detrás de los IPC de los últimos años. Somos muy cuidadosos en no tener alzas excesivas. Ahora, hay una inflación importante que, probablemente, pueda significar alzas. Tratamos de ser cautelosos, pero también tenemos que ir reajustando, según el IPC, nuestros valores”, explica el abogado.
Luis Baquedano, gerente de Unión Española, comenta los motivos del club para no subir las entradas tras el regreso del público: “No había razón para subir los precios. La pandemia no significaba que había que castigar a los hinchas subiendo las entradas. Hemos mantenido los precios por un buen tiempo y los vamos a mantener así hasta fin de año. Recién ahí lo vamos a revisar”.
“Solo elevamos el precio para los partidos de alta convocatoria. El número de guardias se triplica, el número de controles, entre otros. El costo de operación para los partidos de Clase B es mayor. Hay que cobrar más”, concluye.
Rangers tiene una de las entradas más accesibles de todo el fútbol chileno. “Uno de los objetivos de la actual administración fue acercar a la gente al estadio y así recuperar lo que era Talca histórico como plaza. Es por ello que, durante los primeros años, decidimos mantener un precio económico para las entradas. Y una vez que ocurrió lo de la pandemia, dimos un paso más e incluso bajamos el precio de las entradas de lo que estaban hace cinco años”, señala Felipe Muñoz, presidente de la escuadra talquina.
“Pese a que el tema económico ha sido difícil para nosotros durante la pandemia, esperábamos que con una buena campaña, como la que estamos teniendo, el aumento en el público disminuyera el efecto de la baja en el valor de las entradas, para que así esta medida no nos limite tampoco, a través del fair play financiero, en el presupuesto de contrataciones para las temporadas siguientes”, apunta el empresario.