Universidad Católica atraviesa por la peor crisis desde que asumió Cruzados. El tetracampeón del fútbol chileno sumó su sexta derrota en el Torneo Nacional, tras caer por 1-0 ante Huachipato. En vez de pelear por un histórico pentacampeonato, el equipo de la franja se hunde cada vez más en la tabla de posiciones. Está noveno, a solo seis puntos del colista Deportes Antofagasta.
La grave situación que el gerente deportivo del club, José María Buljubasich, se esmeraba en catalogar como una simple mala racha, definitivamente adquirió el dramatismo que se veía venir hace varias semanas. La UC es un equipo perdido en la cancha, sin ideas, sin funcionamiento, de pobre rendimiento futbolístico y sin fondo físico, lo que antes era una de sus principales virtudes.
Pese al delicado escenario que atraviesan los de la franja, el cuerpo técnico liderado por Cristian Paulucci permanece en su cargo. Por ahora, ni siquiera las seis derrotas en las últimas siete fechas del Torneo Nacional han sido argumento suficiente para que la sociedad anónima, encargada de administrar la rama de fútbol del Club Deportivo Universidad Católica, remueva al entrenador.
Sin embargo, esto puede cambiar prontamente, porque la UC ya planea un futuro sin Cristian Paulucci. Tras la derrota ante los acereros, el monarca del fútbol chileno activó el plan de emergencia ante la gravísima crisis deportiva. Por lo mismo, el sondeo de entrenadores ya comenzó.
El problema, dicen en San Carlos de Apoquindo, es que no hay mucho a la mano y no todos los adiestradores disponibles calzan con el perfil que busca Cruzados. Tampoco hay suficiente tiempo ni dinero. Si Paulucci, quien tiene dos años de contrato, no renuncia, el escenario se complica mucho más.
Todo esto coincide con la visita de Juan Antonio Pizzi a Chile. El extécnico de la UC, con la que fue campeón en 2010, y de la selección chilena, con la que conquistó la Copa América Centenario 2016, se encuentra en el país. Según su círculo, se trata de un viaje familiar, rutinario, ya que la hija de Macanudo vive en el Chile.
“Pizzi es un candidato interesante. No dejó buenas sensaciones por la forma en que se fue el 2011, pero tiene cercanía con el directorio actual”, admite un allegado a la mesa controladora. De hecho, varios de los directores de aquella época continúan en el club, al igual que José María Buljubasich, quien fichó al exgoleador del Barcelona.
Ante la emergencia, en la UC están dispuestos a conversar con Macanudo sobre un posible regreso. Por su parte, el argentino-español está libre y sigue activo como entrenador. No se ha retirado de la actividad tras su paso por Racing de Avellaneda y en sus planes está seguir dirigiendo, por lo que está abierto a escuchar propuestas que sean interesantes.
Eso sí, el factor económico es un tema importante en la precordillera, donde los presupuestos son cada vez más acotados por el proyecto de modernización del estadio, ítem que hoy le ocupa mucho tiempo al directorio. Solo en 2021, Cruzados, que se encuentra en medio de un importante proceso de aumento de capital, perdió $ 3.538 millones, es decir, más de 4 millones de dólares. Esta delicada situación se conversará en la junta de accionistas de este miércoles, a las 10 horas, donde seguramente los ánimos estarán muy caldeados por la crisis deportiva del tetracampeón.
Por eso, despedir al Flaco es un dolor de cabeza para la concesionaria. Pagarle los 20 meses que le quedan de vínculo supera los 300 millones de pesos, estiman en el club, lo que aumentaría la complicada situación financiera actual.
Por lo pronto, en la precordillera apuntan a Andrés Romero como posible interino, en caso de resolverse el futuro de Paulucci. El Moto, según cuentan en San Carlos de Apoquindo, está dispuesto a asumir, aunque sea por un breve período, hasta que llegue un técnico definitivo. Incluso, ya tiene un cuerpo técnico en caso de que el club se decida. Ya dirigió como interino en el Apertura 2012, tras el despido de Mario Lepe: ganó tres partidos, empató tres y perdió uno.
No se trata de una decisión fácil. A diferencia del año pasado, en estos momentos no existe una opción clara y concreta para asumir en caso de una debacle mayor a la actual. En 2021, cuando el ciclo de Gustavo Poyet quemaba sus últimos cartuchos, en el directorio ya había total convencimiento de que de Paulucci era el hombre indicado para el interinato. Era la alternativa idónea y no había dobles lecturas. Fue una decisión rápida.
Sin embargo, hoy la situación no es así, ya que además el argentino tiene en su staff a Rodrigo Valenzuela y Jaime Rubilar, dos funcionarios del club que quizás, en otro momento, habrían sido una posibilidad factible para asumir en caso de urgencia. Hoy no lo son, debido a su vinculación con el cuestionado proceso del transandino. Lo mismo ocurre con Emiliano Fleitas, el preparador físico, quien por primera vez asumió ese rol como número uno, en la UC. Antes siempre fue ayudante.
En tanto, desde el entorno de Paulucci no descartan la posibilidad de una negociación que incluya permanecer en el club en otro cargo. O bien, como ayudante del técnico que llegue a reemplazarlo. Por ejemplo, Ariel Holan culmina su contrato con el León de México en las próximas semanas. Y la idea de replicar la dupla que consiguió el tricampeonato seduce mucho en San Carlos, aunque admiten que es complejo, debido a la cotización que tiene un adiestrador del nivel de Holan.