A la final de la presente Copa Libertadores llegaron dos equipos brasileños. Santos y Palmeiras dejaron en el camino a Boca y River y buscarán al próximo campeón del certamen. Eso sí, esta no será la primera vez que dos cuadros de un mismo país definan al ganador. Es la cuarta, de hecho. Y tercera oportunidad en que dos equipos de Brasil llegan al partido definitorio.
La primera vez que un hecho así ocurrió en la Libertadores fue en 2005, cuando Sao Paulo de Brasil se quedó con el trofeo tras vencer por 4-0 en la ida e igualar 1-1 en la vuelta con Atlético Paranaense.
Al año siguiente, en 2006, Internacional derrotó al mismo Sao Paulo, tras ganarle 2-1 en la ida y empatar 2-2 en la revancha.
Luego hay que remontarse a 2018. Fue la última vez en que dos equipos de un mismo país se midieron en la final, en el cruce quizás más esperado del continente, cuando dos argentinos, River Plate y Boca Juniors, terminaron jugando en el Santiago Bernabéu de Madrid la revancha tras una bullada polémica. El trofeo fue para los Millonarios.
Ahora, por primera vez desde que la final se juega a partido único, Santos y Palmeiras buscarán al campeón. Y como si el destino estuviese escrito, lo harán en el mítico Maracaná de Rio de Janeiro, donde ninguno de los dos se sentirá local, puesto que ambos elencos son de Sao Paulo.