Pablo Milad cumple hoy seis meses en el cargo de presidente de la ANFP. Un semestre que se inició con mucha polémica, con acusaciones de votos ilegalmente emitidos y hasta con una impugnación de la elección en la que derrotó a Lorenzo Antillo, presidente de Audax Italiano, por 25 a 23.
Ese 30 de julio de 2020, el curicano cumplió uno de sus sueños pendientes: estar al mando del fútbol chileno. Ya lo había intentado en 2016, pero fue derrotado por Arturo Salah. Luego, en 2018, varios clubes quisieron convencerlo de ir a la pelea nuevamente, pero declinó la opción.
Eso hasta el año pasado, cuando su nombre surgió casi como una especie de bombero, necesario para apagar el incendio político que dejó la administración de Sebastián Moreno, cuya gestión provocó una gran desaprobación en el Consejo y que derivó en una rebelión que acabó con su mandato apenas un año y medio después de haber asumido.
Tal como ocurrió el día de su triunfo, el camino de Milad durante estos primeros seis meses como jefe de la sede de Quilín ha sido pedregoso. Nada fácil. Asumió el mando con un Torneo Nacional que llevaba más de cuatro meses suspendido, debido a la pandemia de Covid-19.
Por eso, sus primeros esfuerzos estuvieron enfocados en la tarea de reanudar las competencias profesionales, debido a la inquietud de las instituciones y también del ex Canal del Fútbol (CDF). Después de varias reuniones con las autoridades y un conflicto en torno a los castigos para aquellos clubes que no cumplieran los protocolos anti coronovirus, los certámenes se reanudaron el sábado 29 de agosto.
Las aguas aún no estaban tranquilas a nivel político. Mientras los clubes de la rebelión preparaban la impugnación a su victoria, los primeros despidos de su administración hacían ruido en los dirigentes nacionales, sobre todo, el de Enrique Osses, jefe de la comisión de árbitros.
La designación de Jorge Osorio como su sucesor no dejó conforme a todos. El nuevo jefe de los jueces era también el formador de los mismos, en el Instituto Nacional del Fútbol (Inaf), y si hay algo en que todos coinciden en el fútbol chileno es en el pobre nivel del referato.
Luego de que el Segundo Tribunal Electoral acogiera a trámite las cuatro denuncias interpuestas por Unión Española, Huachipato, Deportes Valdivia y Ñublense, en contra de los comicios de la ANFP, Milad entendió que su administración no estaba del todo segura. Y aunque la investigación y la resolución pudiera tomar tiempo, esta implicaba un riesgo y una gran interrogante a su presencia en la federación.
Desde el círculo del timonel sostienen que tras ese episodio su forma de proceder tuvo un cambio. Comprendió que no podía gobernar solo con los clubes que apoyaron su candidatura. Necesitaba mediar, acercar posiciones, o podía ocurrirle lo mismo que a Moreno. Enfrentarse decididamente a los mismos personeros que sacaron al mandamás anterior no era lo más recomendado.
Para colmo, apenas algunas semanas después protagonizó el gran bochorno de su gestión. Su gran error, según señalan desde su propio bloque. ¿Cuál fue? La suspensión del partido entre Colo Colo y Deportes Antofagasta. Aquella decisión le costó el apoyo de los pumas y generó una profunda herida en el sector afín al empresario Felipe Muñoz, dueño de Rangers, el principal artífice de su candidatura al sillón de la ANFP.
Fue el propio Milad el que determinó que el partido no se jugara. Para sus aliados, el timonel sucumbió ante la presión de Blanco y Negro, que puso trabas desde un comienzo para que el duelo no se jugara. Antofagasta reclamó y también lo hizo, posteriormente, el directorio de la asociación.
Sin embargo, el hecho de que el timonel suspendiera el encuentro salvó de un castigo de puntos al Cacique, que apenas se llevó una multa cercana a los $ 27 millones. “Es una vergüenza muy grande. Esperamos que el directorio de la ANFP apele a la Segunda Sala. Y en última instancia, que el directorio sea el que sancione”, reclamó Jorge Sánchez, timonel puma. Nada de eso pasó.
El escenario que enfrentaba el presidente del fútbol chileno en sus primeros meses no era para nada alentador. Por un lado, estaba la impugnación de un grupo de clubes; por otro, un incidente que generaba un quiebre en el bloque que lo llevó al puesto y que dejaba la sensación de un torneo poco transparente, con reglas especiales para algunos, además de sentar un pésimo precedente. “Colo Colo puso en riesgo el campeonato y eso no puede ser sancionado con solo 490 UF”, agregaba Sánchez.
Pues bien, en ese momento, el ex lanzador de la bala le dio un giro a su estrategia. Si la elección tenía que repetirse, esta vez podría perderla. Por lo mismo, no le quedó otra que acercarse fuertemente al grupo que impulsó la candidatura de Antillo. No obstante, sería una acción que le traería consecuencias.
Si creyó que podría estar bien con dios y con el diablo, se equivocó. La cercanía que ha mostrado Milad con Victoriano Cerda y con los Pini le ha costado el apoyo de varios clubes. Algunos que al principio lo habían respaldado, se le fueron en contra, aseguran desde instituciones que apoyaron al curicano.
Y ejemplifican en el nombramiento de Jorge Uauy, presidente de Palestino, club que votó por Antillo, como delegado financiero de la ANFP en la Conmebol. Más allá de la designación, el timonel árabe tuvo que ser votado por los presidentes de las demás federaciones y obtuvo el ciento por ciento de los votos.
Los Consejos de Presidentes no han sido fáciles tampoco para Milad, que ha debido enfrentar una fuerte oposición, a la que se sumó el grupo de clubes que lo apoyó y que ahora está descontento. Los brotes de Covid-19 en equipos como La Calera y Curicó Unido tampoco han ayudado a su imagen ni a la del torneo, un certamen que ha sido criticado constantemente por los hinchas debido a los extraños “beneficios” que pareciera brindar no respetar los protocolos.
Ni la selección chilena le ha traído suerte. Los pobre resultados conseguidos por Reinaldo Rueda desembocaron en su salida de la Roja. Hoy, junto al director deportivo Francis Cagigao, está muy cerca de fichar a Matías Almeyda, con quien ya tiene un acuerdo.
“No hay que desconocer que le ha tocado difícil. Han sido meses complejos por la pandemia, por el inicio del torneo. Ha habido situaciones que se podrían haber manejado de otra manera para la tranquilidad de todos, que se manejaron de una manera que no era la más adecuada”, lamenta Antillo.
“Creo que, en base a eso, en conjunto con lo de la Selección y la supuesta decisión que se está tomando ahora, no ha sido lo que uno esperaba, y espero que de aquí en adelante se pueda enmendar el rumbo haciendo cumplir el reglamento, respetando lo que está escrito”, agrega.
En medio de rumores de personalismo y de posibles renuncias de parte de sus directores, descontentos con la poca participación que han tenido en la administración, vino otro mazazo, nuevamente causado por un club de su sector. Deportes Iquique recurrió al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia para que deje sin efecto los descensos de la tabla ponderada.
“El directorio debe ejercer el rol que tiene, que es hacer cumplir los estatutos y los reglamentos que nosotros mismos como industria del fútbol hemos escrito. Que trabaje para engrandecer el fútbol, la industria, y fortalecer a los clubes que estamos muy golpeados. Creo que hace falta un poquito más de preocupación por los clubes, eso se ha echado de menos, pero no se puede desconocer que han sido meses difíciles”, cierra Antillo.
Felipe Muñoz coincide en que es necesaria más cercanía de parte de la mesa. “Creo que lo mejor fue haber logrado que se juegue el torneo apenas había asumido la presidencia. Y me parece que la pandemia y el distanciamiento que esta obliga no le ha permitido estar cerca de las necesidades de los clubes. Esperamos que eso avance en la medida que estas medidas cambien”, apunta.
En la ANFP se defienden y destacan los cambios que se han realizado en la organización, durante este semestre. Por ejemplo, la reestructuración interna que le ha permitido a la entidad ahorrar varios millones al mes. O el mismo fichaje de Cagigao, ex secretario técnico del Arsenal, como director deportivo nacional, incorporación que le sube el nivel a la industria, aseguran. También la importancia que se le ha dado a la selección chilena femenina de fútbol, que se prepara para su duelo con Camerún, por el repechaje olímpico. Al respecto, las Rojas han entrenado en el complejo Juan Pinto Durán y viajarán en categoría business a África, condición que, hasta hace poco, solo estaba reservada para el combinado adulto masculino.
A Milad le quedan dos años aún. Su idea es culminar el proceso y repostularse, aunque todavía le queda un largo y pedregoso camino por recorrer.