Apenas el Consejo de Presidentes de la ANFP ratificó la decisión de incorporar seis extranjeros en cancha en el Torneo Nacional de Primera División, el Sindicato de Futbolistas Profesionales lanzó un comunicado en el que anunciaba el llamado a una asamblea extraordinaria para determinar la paralización del inicio del campeonato, lo que debiese confirmarse en las próximas horas.
“Consideramos de una total irresponsabilidad que ciertas instituciones se abstengan en una decisión tan relevante para el fútbol chileno, generando un clima de inestabilidad y daño para la actividad”, expresaron en el comunicado, en el que además acusaron que “al interior del Consejo de Presidentes existen clubes que quieren reventar el actual sistema del fútbol chileno, aprobando medidas que solo benefician su modelo de negocios”.
La declaración anuncia un quiebre inminente. Sin embargo, de inmediato surgía la natural inquietud sobre qué ocurrirá con la final de la Supercopa, que disputarán Huachipato (campeón de Primera) y Colo Colo (campeón de Copa Chile), el 11 de febrero, a las 19.00, en el Estadio Nacional. Inmediatamente, las dudas asomaron a partir del comunicado que tampoco hace referencia a esta definición, pues solo alude al inicio del Torneo de Primera División, por lo que queda en una especie de limbo.
“Nos presentaremos a jugar la Supercopa”
Según diversas fuentes consultadas, a las 22 horas de este jueves, el Sifup mantuvo una reunión telemática con los capitanes de los acereros y de los albos para conversar sobre la decisión de disputar o no ese partido. La respuesta de los jugadores fue que se presentarán a ese encuentro, que también es la postura institucional previamente conversada, por lo que bajo este escenario el duelo no corre riesgo de suspensión y ya en los próximos días se iniciará la venta de entradas.
En el caso de los acereros, los capitanes se habían alineado y conversado con la dirigencia sobre el tema, mientras que los albos necesitaban ese partido para llegar con rodaje al trascendental duelo ante Godoy Cruz en Mendoza, el 22 de febrero.
Respecto a la Supercopa, El Deportivo le consultó al actual campeón del fútbol chileno. “Huachipato se presentará con plantel estelar a jugar la Supercopa en el Estadio Nacional. Es una decisión que está tomada”, respondió de forma categórica y oficial el elenco acerero. Y aunque en Blanco y Negro no se pronunciaron de manera formal, altas fuentes del directorio coincidieron: “Colo Colo se presentará el 11 de febrero a jugar la Supercopa”.
Así, la posibilidad de detener el fútbol inmediatamente no se ve posible, lo que en cierto modo podría permitir ganar tiempo a la hora de negociar un acuerdo que permita que el torneo 2024 comience sin problemas el 16 de febrero, a las 19.00, tal como estaba programado, con el duelo entre Everton y Palestino en Sausalito.
Esta tarde, la entidad convocó a una conferencia de prensa en su nuevo complejo deportivo en Pirque. Ahí Gamadiel García entregará detalles de la postura que tendrán y de cómo enfrentarán este nuevo capítulo que amenaza con frenar el inicio de la actividad.
Los esfuerzos de Milad
La situación llevó a Pablo Milad y a su directorio a tratar de rectificar la postura inicial, lo que incluso fue destacado por el propio sindicato en su comunicado. “Valoramos el esfuerzo que realizó el directorio de la ANFP por llegar a un acuerdo para mejorar las condiciones de la industria, trabajo desechado sin argumentos por clubes que sólo piensan en sus intereses particulares”, expresaron.
El exintendente del Maule durante el gobierno de Sebastián Piñera se mantuvo en contacto permanente con García para intentar aunar posiciones y poner fin al conflicto. Fue así como la ANFP planteó la posición de mantener a los seis los futbolistas extranjeros que podían ser inscritos, pero con el matiz de que cinco podían actuar simultáneamente. Sin embargo, el Consejo, máxima instancia del fútbol nacional, se mantuvo firme en la postura de que todos pudieran actuar al instante, propinándole así una dura derrota al timonel.
Según información a la que accedió El Deportivo, Audax Italiano, Everton y Unión La Calera rechazaron la moción del directorio. Huachipato, Ñublense y Universidad de Chile, en tanto, se abstuvieron. De esta forma, no se consiguió el respaldo necesario para que la propuesta que había impulsado Milad se concretara. Hubo 10 votos a favor de mantener la propuesta original.
“Son los mismos dueños de instituciones que tienen multipropiedad, que están vinculados con los agentes de jugadores, que años atrás propusieron eliminar los descensos y que ahora votaron para aumentar el cupo de extranjeros”, repudió el Sifup, sobre el comportamiento de los clubes que rechazaron la propuesta de Quilín.
Con el sindicato en pie de guerra por la medida y los clubes sin la intención de dar marcha atrás, el fútbol chileno se enfrenta a una nueva crisis, cuya solución por ahora se ve bastante lejana.
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