De golpe y porrazo, el fútbol chileno pasó de estar casi cinco meses sin actividad a encontrarse con una nueva edición del Superclásico. El fútbol post pandemia encuentra a la U y Colo Colo atravesando realidades disímiles, aunque con un duelo por delante igual de fundamental para ambos.
Por un lado, el cuadro estudiantil que tras un 2019 de pesadilla, por ahora transita tranquilamente en los puestos de avanzada del Torneo 2020. Los de Caputto, que ha trabajado con Diego Carrasco en vez de Luis Del Pino como única novedad, están obligados a ganar si es que no quieren perderle pisada a la UC, que ayer venció.
Los azules no solo enfrentan al Cacique. También a su historia reciente con los albos, esa que dice que hace más de siete años que no pueden superarlos. Fue en mayo de 2013, cuando el fútbol chileno aún era presidido por Sergio Jadue, al Chuncho lo dirigía Darío Franco y Charles Aránguiz era la figura. Suena a otra era, incluso.
Al frente, un Cacique que ha vivido un año sumido en severas crisis. Futbolísticas, dirigenciales e institucionales. De no ganar, los albos comenzarán a coquetear con los puestos de descenso. Y como si fuera poco, Gualberto Jara sufre con Matías Zaldivia, quien no pudo superar una dolencia en el gemelo. Los centrales serán Barroso e Insaurralde.
