Un Puma suelto en San Carlos: la UC firma por siete años con la marca alemana de vestimenta deportiva
La compañía volverá vestir a Universidad Católica, esta vez será por el período 2024-2030. Cruzados suscribe un acuerdo que contempla US$ 1,5 millones anuales y que puede ser un salvavidas para la institución estudiantil.
Universidad Católica recibe un salvavidas económico en medio de la crisis deportiva que azota al club de San Carlos de Apoquindo. En medio del turbulento mes que han vivido en Cruzados, suscriben un acuerdo con Puma para que sea la marca que vista a la UC por las próximas siete temporadas. Se trata del contrato más largo de este tipo desde que la institución es manejada por la concesionaria.
En la precordillera firman por US$ 1,5 millones anuales y la sociedad anónima debiese recibir un pago inmediato por el hecho de rubricar el negocio, aunque se desconoce la cantidad. Aun así, los ingresos por el pacto con la compañía alemana incrementan el dinero en las alicaídas arcas del equipo que hace dos temporadas lograra un histórico tetracampeonato. A la hora de explicar el austero mercado de pases que se realizó para reforzar el plantel, Juan Tagle ha enfatizado en que el problema es monetario.
“Todo lo recaudado por el aumento de capital y emisión de bonos está destinado a la reconstrucción del estadio. Si yo ocupara eso en traer un jugador, estaría cometiendo un delito”, enfatizaba el abogado hace algunas semanas.
“Los ingresos ordinarios que tiene un club los destinamos al funcionamiento normal y su principal gasto que es el plantel. Es como si fueran dos sociedades separadas. No hay fondos del negocio ordinario de Cruzados que vayan al estadio ni viceversa”, agregaba. Eso sí, el bono de US$ 3,1 millones que recibió el cuadro de la franja, en enero de 2019, cuando se vendió el CDF al Grupo Turner, fue gastado en el proyecto estadio casi en su integridad, tal como lo ha señalado en reiteradas ocasiones Juan Pablo Pareja, gerente general de la sociedad anónima.
La compleja situación del elenco se refleja en que no fue capaz de fichar ningún refuerzo, pese a las urgencias claras de un plantel mal conformado y desequilibrado. Ni siquiera con las salidas de Matías Dituro y Mauricio Isla, y el correspondiente ahorro de sus salarios, pudieron incorporar un lateral derecho y un volante, dos posiciones que eran necesarias y que le penan al equipo que hace poco era el mejor plantel del fútbol chileno.
Un viejo conocido
¿Por qué Puma vuelve a la UC en medio de la crisis del equipo? Según apuntan en la precordillera, el nuevo recinto que se construye jugó un rol clave en el interés de varias marcas, por ejemplo, Adidas. Más allá de llevar dos campeonatos con resultados negativos dentro del campo de juego, en Cruzados han insistido en que buscan entregar una imagen positiva.
En ese contexto, la refacción de San Carlos de Apoquindo, que además de ser utilizado para jugar fútbol, está pensado como lugar para recitales, reuniones corporativas y otros eventos, brinda un concepto de seriedad que es importante para la empresa multinacional. Además, se trata de una marca que ya ha estado con Cruzados en el pasado.
Remitiéndose a la historia del CDUC, Puma los vistió entre 1989 y 1991. Luego volvió a las huestes precordilleranas en 2008. Dos años más tarde, cuando Cruzados SADP tomó las riendas de la rama de fútbol, renovó su vínculo, el cual finalmente se mantuvo hasta 2014. Aquel período, eso sí, terminó con un grupo de fanáticos de la UC muy molestos por la calidad de las camisetas que destinaban a la venta.
Tras la salida de la compañía con sede en Herzogenaurach, Alemania, Umbro vistió a la Católica por tres años. Una vez cumplido el contrato, Under Armour fue la marca que arribó. En esta ocasión, fueron cuatro las temporadas que estuvo la empresa norteamericana. Ninguno de los dos contratos contemplaba los montos ni la extensión con la que llegará Puma en 2024.
En su momento, el proveedor fundado por Rudolf Dassler innovó en el diseño de la casaca estudiantil. Fueron quienes crearon una tercera indumentaria durante todas las temporadas. Antes, la UC ya lo había hecho, pero de manera muy intermitente. Tras el diseño celeste que usaron en la Copa Sudamericana 2011, Puma diseñó camisetas para las participaciones internacionales del equipo. En 2012, dirigidos por Martín Lasarte, la escuadra franjeada escaló hasta semifinales del torneo subcontinental con una camiseta gris. En 2013 crearon una sudadera rojiblanca y, en 2014, una negriazul.
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