Paulo Garcés (San Luis), en el arco; Franz Schultz (Barnechea), Mauricio Zenteno (D. Iquique), Sebastián Toro (U. San Felipe) y Jean Beausejour (Coquimbo U.), en la defensa; Michael Ríos (Lautaro de Buin), Carlos Carmona (Coquimbo U.) y Carlos Espinosa (D. Iquique), en el mediocampo; Nicolás Maturana (Cobreloa), Esteban Paredes (Coquimbo U.) y Felipe Flores (Barnechea), en la delantera.
En el papel, una oncena estelar, con buenos nombres, todos con títulos importantes o con algún paso por la selección chilena, incluyendo mundiales. Podría tratarse de la alineación estelar de cualquier equipo de Primera División que esté ilusionado con pelear arriba. Sin embargo, no es el caso. Al contrario, se trata de una breve y rápida selección de jugadores de renombre que este año animarán el campeonato de Primera B. Un torneo que estará cargado de estrellas y que promete estar más apasionante que nunca.
Deportes Puerto Montt y Deportes Copiapó serán los encargados de abrir la temporada 2021, hoy, a las 15 horas, en el Bicententario Chinquihue. Mientras que el plato fuerte de la jornada lo protagonizarán dos elencos recién descendidos, Deportes Iquique y Coquimbo Unido, mañana, a las 11.00, en el Tierra de Campeones.
Sin duda, la atención se focalizará en los piratas. El elenco dirigido por Héctor Tapia tiene el favoritismo tras los flamantes fichajes de Paredes, Beausejour y Carmona. El Tanque y el volante central vienen precedidos de la peor campaña en la historia de Colo Colo, en la que estuvieron a un paso de perder la categoría por primera vez. Ambos se fueron por la puerta de atrás, pese a sus pergaminos.
Por su parte, el lateral izquierdo deja atrás cuatro años y medio en Universidad de Chile, donde no pudo convencer a los hinchas. Su irregular rendimiento, su pasado albo y su alto precio (US$ 2,5 millones pagados a ByN) le jugaron en contra. Eso sí, en la Roja no hubo nadie que le discutiera el puesto.
Los aurinegros tienen más nombres interesantes, como Renato Tarifeño y Juan Carlos Espinoza. Mientras que Iquique, otro de los favoritos, mantuvo a buena parte del plantel que compitió en Primera en 2020. En sus filas destacan Álvaro Ramos y el capitán Zenteno. A ellos se suman refuerzos de buena técnica como Espinosa y el venezolano Edwuin Pernía.
“Nuestro objetivo es bastante claro: volver lo más pronto a Primera División. Por algo se hizo un esfuerzo tremendo en mantener muchos jugadores que hicieron una buena temporada y se trajo a muchos que conocen bien la división, complementado con juveniles que conoce bien Cristian Leiva”, señala Césare Rossi, presidente de los Dragones Celestes.
Cobreloa también quiere volver a la división de honor y en su planilla hay tres figuras que destacan: Maturana, con pasos por el Cacique y la U; el volante Fernando Barrientos, exLanús y quien fuese sondeado por los albos, en 2017; y Francisco Castro, multicampeón con los azules de Jorge Sampaoli.
El resto de los clubes no se queda atrás. Barnechea tiene a Felipe Flores, excampeón con Colo Colo, y a Franz Shultz, campeón con la U en 2017; Rangers, a Sebastián Jaime (bicampeón con la UC y campeón con Unión) y a Yashir Islame (antes Yashir Pinto), ex sparring de Marcelo Bielsa; San Luis, a Diego Rojas, excampeón con Católica; Temuco, a Hugo Droguett, quien jugó en la UC y la U; Copiapó, a Fabián Manzano, bicampeón con los cruzados en 2016; Santiago Morning, a Steffan Pino, citado por Reinaldo Rueda para un microciclo; Universidad de Concepción, a Kevin Medel, hermano de Gary, el Pitbull; Unión San Felipe, a Toro, multicampeón con Colo Colo; y el cuestionado Lautaro de Buin luce a Ríos, con pasos por San Carlos de Apoquindo y el Monumental.
En el ítem de arqueros también hay cuento. Además de Garcés, quien jugó en los tres grandes, también sobresalen Matías Cano, de Coquimbo, o el ex seleccionado nacional Yerko Urra (Temuco), quien incluso disputó la Copa América 2019 con Chile. Jorge Deschamps (Rangers), Lucas Giovini (San Felipe) y Guillermo Reyes (U. de Concepción) también ostentan una valorable trayectoria.
“La B es una división muy complicada, donde cualquiera le gana a cualquiera. Es difícil. Acá no compite la planilla más alta con la más baja. Se juega en canchas difíciles”, advierte Rossi sobre un torneo que promete mucho, gracias al brillo de estrellas que hace poco iluminaban en Primera.