Libertad Hurtado / Ilustración: Sofía Valenzuela
23 jul 2024 05:00 PM
“La verdad es que fue muy difícil a mi edad, después de tantos años de casada, dejar el matrimonio, pero miren ahora dónde estoy”, dice una mujer de 76 años que decidió separarse de su esposo, después de 40 años juntos, para vivir el resto de los años que le quedan feliz y libre.
En este relato, una de nuestras lectoras reflexiona sobre la necesidad imperiosa que a veces tenemos de buscar 'razones de peso' para decidir terminar una relación. ¿Es no sentirse enamorada una razón suficiente? ¿O simplemente no ser feliz puede ser motivo válido para poner fin a un matrimonio?
Para los médicos, el amor era una enfermedad que volvía locos a los hombres e incluso podía matarlos. Este es el tratamiento que recibían los pacientes enamorados.
Si te cuesta encontrar pareja o simplemente no tienes interés en tener una relación romántica, puede que te hayas preguntado si puedes alcanzar la felicidad así. Esta es la explicación de un estudio.
Algunas personas que tienen entre 18 y 25 años podrían experimentar complejos traumas a partir del desamor. Los investigadores recomendaron no subestimar estos sentimientos y validarlos.
Después de veinte años de amor y apoyo incondicional, este hombre se enfrenta a una difícil decisión: ceder al deseo de su pareja de ser padres por segunda vez, para mantener el equilibrio de su relación, o ser fiel a sus deseos y convicciones.
Una dolorosa separación llevó a nuestra lectora Camila, a reconectar con su pasado y con la niña sensible que una vez fue. Así transformó su dolor en un don y descubrió una nueva misión de vida. Aquí su historia.
Una crianza dura hizo que Marcela creciera con la convicción de que el amor no era lo suyo. Pocas veces logró sentirlo de verdad. Sin embargo, en esta columna nuestra lectora comparte cómo pudo cambiar esa idea. Y es que cuando aprendió que estar a gusto consigo misma, sin esperar retribución externa, recién ahí pudo aprender a amar.
Las personas no necesariamente se están alejando del romance tradicional, sino que se están volviendo hacia otras alternativas.