Cinco meses antes de que en septiembre de 1988 comenzara la franja del No, la Concertación le encargó los clips de la campaña a una quincena de cineastas. Se ganaban la vida en la publicidad, soñaban con hacer un largometraje y trabajaban con o sin guión. No cobraron, pero ganaron por paliza.
Rodrigo González
6 oct 2018 11:42 PM