Nyan Tun, de 58 años y al mando de la fuerza naval birmana desde 2008, sustituye a Tin Aung Myint Oo, quien oficialmente dimitió por problemas de salud.
EFE
14 ago 2012 09:09 PM
Nyan Tun, de 58 años y al mando de la fuerza naval birmana desde 2008, sustituye a Tin Aung Myint Oo, quien oficialmente dimitió por problemas de salud.
Phyo Wai Aung, de 33 años y condenado el pasado mayo por causar la muerte de 10 personas en una serie de atentados con bomba hace dos años, fue puesto en libertad ayer por razones humanitarias.
Diez mujeres y 82 hombres fueron detenidos en territorio birmano el 4 de julio, después de cruzar la frontera común con buldóceres, camiones y sierras mecánicas.
La líder opositora de la ex Birmania señaló antes de tomar su cargo que intentaría hacerlo lo mejor posible por su país.
La violencia comunitaria que estalló el 8 de junio en el norte del Estado de Rajin, en la frontera con Bangladesh, antes de propagarse a su capital Sittwe.
La activista ganó un cupo parlamentario, después de que su país, Birmania, recuperara la democracia tras una dictadura militar que gobernara entre 1962 y 2011.
Luego de no haber podido visitarla en 2009, cuando se encontraba con arresto domiciliario, Ban Ki Moon tuvo una reunión con la premio Nobel de la Paz.
La Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi, liberada en noviembre pasado, viajó a los templos de Bagan, en la región central de Birmania, para encontrarse con su hijo menor.
Según medios de la disidencia, los militares las llevarían consigo para defenderse de las emboscadas de la guerrilla del grupo étnico shan.
EarthRights Internacional teme que el proyecto, además, induzca a una escalada de violencia en la zona entre el Ejército y las guerrillas.
Según el Servicio Geológico de Estados Unidos, el epicentro se ubicó en el noreste del país, en la frontera con Laos y Tailandia.
Representantes de ambos países rechazaron las resoluciones como instrumentos de presión de los países occidentales para atacar sus sistemas políticos.
Jim Webb consiguió la libertad de John Yettaw, condenado a siete años de trabajos forzados por entrevistarse con la Premio Nobel Suu Kyi.
El mandatario norteamericano calificó como injusta la condena y sentencia impuestas a la dirigente opositora birmana.