Bautizada como “Rompamos la Cadena del Comercio Ilegal”, la iniciativa busca “mantener libres los espacios” del transporte subterráneo y continuar con la recuperación de dichos lugares, que ha venido impulsando el gobierno en los últimos meses. Apunta a comida, medicamentos y artículos navideños.
Desde el 19 de mayo pasado, la Delegación Presidencial se propuso recuperar varios sectores de la capital y tratar de erradicar la delincuencia y el comercio ilegal. En la mayoría lo ha logrado, pero Plaza de Armas y el Paseo Ahumada no logran escapar de los carros, los toldos y los productos en el piso.
Antes de asumir como delegada presidencial de la Región Metropolitana, la exdirigenta estudiantil se caracterizaba por mantener una postura crítica de las fuerzas de control de orden público. Sin embargo, ha tenido que ir haciendo a un lado ciertos reproches y trabajar codo a codo con ellos para, por ejemplo, avanzar en el control del comercio irregular. Como sincera luego de nueve meses en el puesto, Carabineros se transformó en uno de sus principales "aliados" para realizar la labor que le encomendó el Presidente Boric.
La policía uniformada conformó distintos escuadrones para aumentar las fiscalizaciones en Plaza de Armas, Paseo Ahumada, San Pablo, Puente, entre otras calles del casco histórico. La comuna no enfrenta un buen escenario: desórdenes en los liceos emblemáticos, el disparo del comercio ambulante y un aumento de un 55% en los delitos de mayor connotación social. El municipio también activó un plan.
La alcaldesa tenía planificado asistir este miércoles a un encuentro por el medioambiente en Montevideo. Hasta hace poco era una decisión tomada, a pesar de los desórdenes en los colegios y comercio ambulante lo que ya le había generado críticas en el seno del Concejo Municipal. En las últimas horas la jefa comunal optó por quedarse.
La iniciativa tendrá una duración de dos meses, en los que se desplegarán cuadrillas informativas para comunicar "a los usuarios sobre los riesgos asociados a los que se exponen frente a la compra y consumo de alimentos sin las condiciones mínimas sanitarias”.
La iniciativa financiada por casi $380 millones convocará a más de 3.200 comerciantes informales para que “se reinventen laboralmente, ya sea insertándose en un trabajo formal o iniciando un nuevo emprendimiento”.
Un estudio realizado por la Cámara Nacional de Comercio da cuenta que casi el 40% de los entrevistados tiene educación media o secundaria completa.
El trabajo estará a cargo de la Universidad Católica y parte de la metodología del trabajo será a través de entrevistas y encuestas a los vendedores ambulantes, compradores y actores relevantes. Todo esto en 20 puntos de la Región Metropolitana. Resultados estarán en nueve meses.
El alcalde ha aseverado, desde 2018, impulsar un proyecto para regularizar el uso del espacio público en la Ciudad Puerto, sin embargo, a la fecha no hay resultados concretos. Bajo su mandato hay vigentes 473 permisos precarios, pero la Cámara de Comercio cifra en 7 mil a los informales. Por su parte, la Contraloría mantiene su administración bajo la mira, luego que reiterara -en mayo- observaciones al sistema de otorgamiento y cobro de autorizaciones temporales. El Colegio de Arquitectos de la comuna plantea que la problemática afecta el "derecho a la ciudad".
La tradicional tienda inició acciones judiciales contra de la municipalidad dirigida por Irací Hassler (PC) por los vendedores no regulados en las afueras del local ubicado en el Paseo Ahumada. "La cantidad que se instalaba era mínima, tolerable, muy baja en términos de proporciones; no obstaculizaba el tránsito de la calle ni tampoco impedía el acceso a nuestro local comercial. Sin embargo, la presencia masiva de comercio ambulante comenzó a evidenciarse a principios de este año, creciendo exponencialmente mes a mes e intensificándose aún más el de junio, al punto que ahora tenemos verdaderos empresarios comerciantes”, dice el recurso.
Con la mayor presencia policial, los vendedores ambulantes están ocupando nuevos espacios en las calles aledañas. Ayer, el tránsito estaba cortado por los toldos azules en Salvador Sanfuentes, mientras el metro Estación Central se mantuvo desocupado. Los locatarios agradecen la medida, aunque advierten que los coleros pueden regresar en cualquier momento.
Aunque la medida buscó liberar buena parte del sector, tomado por vendedores ilegales, sus toldos fijados a la acera e incluso electrificados retrasaron el trabajo de los uniformados. Autoridades califican el problema como “crimen organizado” y prometen un plan cuadrante.
Paulina del Campo señaló que la empresa del ferrocarril subterráneo trabaja en distintas mesas de trabajo, tanto con el gobierno regional como con diversos municipios, para erradicar la presencia de vendedores ambulantes en estaciones y andenes, en una tarea en la que también se mantienen coordinados con las policías.
La alcaldesa de Santiago no elude ni minimiza los graves problemas de seguridad que afectan hoy a Santiago, como el descontrolado comercio ambulante, delincuencia y tomas de colegios. “No existe mano blanda, pero estoy convencida que el diálogo con las comunidades organizadas es la mejor vía para enfrentarlos”, dice la joven edil comunista, que hace justo un año fue la sorpresa de las elecciones municipales.
