El reporte de la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte fue emitido un día después de que el país anunció el cierre de zonas no especificadas de la provincia de Ryanggang, luego de que cuatro personas padecieron fiebre, de la que se sospechaba que hubiese sido causadas por coronavirus.
Nuevos contagios de coronavirus se dan luego que el líder Kim Jong Un asegurara que el éxito norcoreano contra el virus sería reconocido como un milagro de salud global. Los expertos creen que Pyongyang ha manipulado la información relacionada con el brote a fin de ayudar al gobernante a mantener un control absoluto.
Ambos países aseguran que son ejercicios de naturaleza defensiva para coordinar fuerzas ante una hipotética invasión de Corea del Norte, según informa la agencia de noticias Bloomberg.
Kim Yo Jong, hermana del presidente norcoreano, dijo que “nunca aceptará la audaz iniciativa” del gobierno de Seúl. El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol había anunciado el lunes que estaría dispuesto a ofrecer un paquete de ayuda económica a su vecino del norte a cambio de la desnuclearización.
El jefe de las fuerzas prorrusas de esa región del este de Ucrania envió un mensaje al gobernante norcoreano Kim Jong Un en el que le propone cooperación, en medio de indicios de que Pyongyang podría enviar trabajadores para proyectos de restauración en las regiones ucranianas controladas por Rusia.
“Declaro solemnemente la victoria en la campaña antiepidémica de máxima emergencia para exterminar el nuevo coronavirus y proteger la vida y la salud de las personas”, aseguró líder norcoreano, Kim Jong Un. El anuncio se interpreta como un aparente triunfo ante Corea del Sur, puesto que desde Pyongyang acusan a Seúl de haber introducido el virus desde la frontera entre ambos países.
Pyongyang calificó la visita de la presidenta de la Cámara de Representantes estadounidense, “a pesar de la fuerte protesta y advertencia solemne de China”, como una grave violación de la soberanía y la integridad territorial de China, un hecho “imperdonable” a ojos de Corea del Norte.
Autoridades del país asiático acusaron a la presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU. de incitar sentimientos opuestos a los norcoreanos, tras su visita a Corea del Sur. Pelosi estuvo en una área fronteriza y conversó sobre el programa nuclear norcoreano con Kim Jin Pyo, presidente de la Asamblea Nacional surcoreana. Según Kim, respaldarán iniciativas de sus gobiernos para la desnuclearización y la paz en la península coreana con base en una fuerza disuasoria sólida.
El centro estatal de emergencia antiepidémica de norcoreana dijo a través de los medios de comunicación estatales que no había encontrado ningún paciente con fiebre en el último periodo de 24 horas. Sin embargo, existen dudas generalizadas en el exterior acerca de la precisión de las estadísticas, ya que las cifras de muertes declaradas son demasiado bajas y los casos diarios de contagios han descendido demasiado rápido.
El líder norcoreano, Kim Jong Un, expresó que "Corea está completamente lista para responder a todos los enfrentamientos militares con Estados Unidos", agregando que si Washington continúa “lastimando” la imagen del país y atenta contra su seguridad y sus intereses, “tendrá que resignarse a tener mayores preocupaciones y crisis”.
La ministra de Asuntos Exteriores norcoreana, Choe Sun Hui, envió cartas a los gobernantes de las regiones de Donetsk y Luhansk para transmitirles la decisión de su país de reconocer su independencia y su voluntad de desarrollar relaciones diplomáticas con ambas. En respuesta, el régimen ucraniano cortó los lazos diplomáticos con Corea del Norte y condenó la decisión por atentar contra la soberanía y la integridad territorial de Ucrania.
Desde Pionyang consideran que las negociaciones realizadas en la reunión trilateral de la OTAN entre Estados Unidos, Japón y Corea del Sur son “una conspiración contrarrepublicana” y estudian adoptar medidas.
El director general del Departamento de Organizaciones Internacionales de la diplomacia norcoreana, Jo Chol Su, cuestionó que el G7, “un grupo que representa los intereses de un pequeño número de Estados”, discrepe sobre “las medidas de autodefensa” de Corea del Norte. En clara alusión a EE.UU. dijo que “en el G7 hay un país que ha desarrollado, desplegado y vendido masivamente armas letales para la agresión" contra otros Estados.
Choe Son Hui, quien antes era viceministra de Exteriores, asumió su cargo en plena reunión de la cúpula del Partido de los Trabajadores del país, la que fue presidida por el líder Kim Jong Un. Choe sustituye a Ri Son Gwon, un oficial de línea dura que anteriormente dirigió conversaciones con Corea del Sur.
La prueba se realizó frente a la costa oriental de Corea del Sur, debido a que el domingo el régimen de Kim Jong-Un lanzó una andanada de misiles balísticos de corto alcance. Para Seúl, este operativo es una demostración de “la capacidad y la preparación para llevar a cabo un ataque de precisión”.
