Los ribetes que alcanzó el debate sobre regulaciones a la industria forestal en medio de los incendios en el sur, abierto por el propio Presidente, generó irritación en los privados, quienes denuncian un ataque permanente desde el gobierno por diferentes crisis en materia de seguridad, catástrofes, salud y pensiones. Pese al “portazo” de la ministra Tohá esta semana a un royalty a la industria forestal, el conflicto dejó esquirlas en el empresariado y obligó a Marcel a operar desde su lugar de vacaciones.