Puso bombas, planeó asesinatos, ordenó la disolución de cuerpos en ácido y gestionó la ejecución del hijo pequeño de un ex mafioso. Asimismo, el violento grupo que lideró, la Costa Nostra, es referenciado en las películas de El Padrino. Estos son los motivos que llevaron a que el nombre de Matteo Messina, alias “Diabolik”, fuese una amenaza constante para la sociedad italiana.
Asegurando que “el gobierno va a avanzar igual” en esos temas, Manuel Monsalve sostuvo que la ventaja del posible acuerdo es que el avance "puede ser más rápido".
Los delitos de alta connotación social han aumentado de manera irrefutable en el último año. Estos afectan la integridad de las personas y sus oportunidades de desarrollo y prosperidad económica. Las acciones y omisiones de la autoridad en estas materias no son inocuas. Indultar a personas con condenas ejecutoriadas por tribunales competentes no contribuye a resolver las principales preocupaciones de las personas como delincuencia y economía.
El crimen tuvo lugar la madrugada del domingo 11 de diciembre pasado.
Con la sensación de inseguridad encumbrada en su peak de las últimas dos décadas, algunas personas comenzaron a contratar escoltas privados para depositar o retirar grandes cantidades de dinero en el banco, además de comprar o vender automóviles. ¿Cómo operan las empresas que ofrecen este servicio en Chile? ¿Son legales? ¿Pueden, por ejemplo, portar armas de fuego?
"Nuestra invitación, nuestro llamado, es a debatir lo que haya que debatir, a mantener los debates políticos y las diferencias donde están, pero en las cosas que hemos logrado acuerdo no restarle la posibilidad a la ciudadanía de ver traducirse esos acuerdos en medidas concretas", señaló la ministra de Interior.
La normativa surgió en respuesta a la solicitud de empresas de logística a nivel nacional, al no existir un procedimiento al cual acudir cuando el robo se producía en bodegas, transportes o tiendas de retail.
La Región de Tarapacá registra una tasa de 10,3 afectados por homicidio por cada 100 mil habitantes y el promedio nacional es 4,6.
En su segundo año de gobierno, Gabriel Boric –a diferencia de todos sus antecesores- tendrá que convivir con una elección de convencionales y otro plebiscito que, sin duda, polarizarán el ambiente. No obstante, las cifras indican un efecto pendular en varios temas y un regreso a la moderación que podría dar al Mandatario espacio para concretar sus reformas y subir su alicaído apoyo. Hay una brusca caída de la violencia como fin para conseguir cambios, la confianza en carabineros se encuentra en su nivel más alto y existe una suerte de recuperación del orgullo nacional. Sin embargo, seguirán los coletazos del estallido y la pandemia -económicos y en salud mental- y la delincuencia se mantendría como la principal preocupación de los chilenos. Esta sensación de inseguridad y la inflación comenzarán a modelar las encuestas políticas.
El debate para renovar la presencia militar en la Macrozona Sur se ha transformado en un espacio de reclamos de parte de parlamentarios contra la gestión de Interior. La impaciencia frente al alza de la delincuencia y el lento avance de la agenda de seguridad ha llevado a algunos legisladores a rechazar o abstenerse como señales de protesta.
El sondeo de opinión revela que tanto los atributos personales, políticos y los de gestión del Presidente Gabriel Boric evidenciaron una caída que se acentúa con el desplome de su nivel de confianza, que al asumir el cargo alcanzaba el 54% y esta semana llegó al 34%.
“Es el lugar que planteamos con dirección exacta en la reunión que tuvimos con la ministra del Interior el viernes y es un punto que hemos solicitado desde el día uno que pueda tener una investigación específica, porque hay una situación reiterada”, afirmó la alcaldesa.
El sondeo de opinión dio a conocer que un 87% de la muestra encuestada cree que la delincuencia habría aumentado en el último año y entre los ilícitos que evocan una mayor preocupación entre las personas, las encerronas o portonazos lideran las opciones, con un 49%; seguido por los robos en las viviendas, con un 40%; y los homicidios o sicariatos, con un 31%.
