Según el Departamento de Justicia de Estados Unidos, Google paga actualmente más de US$10.000 millones al año para continuar siendo el motor de búsqueda predeterminado en navegadores web y móviles, lo que ha provocado la reacción por parte de los organismos “antitrust” de la primera potencia del mundo.
La IA además podría extraer información de vuelos desde Google Flights y documentos almacenados en Google Drive.
El gigante tras el popular buscador, el navegador Chrome, Gmail y YouTube podría terminar menoscabado si el caso acaba obligándolo a hacer concesiones que socaven su poder.
El Departamento de Justicia acusa a Google de pagar miles de millones de dólares anuales a fabricantes de dispositivos como Apple Inc, empresas de telefonía móvil como AT&T y fabricantes de navegadores como Mozilla para mantener su motor de búsqueda en lo más alto.
El listado abarca desde la creación de Google Imágenes, hasta la implementación del traductor y Google Lens.
La perspectiva de enriquecerse con los podcasts llevó a inversiones agresivas en contratos con famosos y programación original para lo que parecía una frontera mediática sin límites. La mayoría de sus programas no son rentables, según personas familiarizadas con el asunto, y la empresa ha recortado recientemente personal y programación para frenar sus pérdidas.
Más allá de las noticias falsas y sus efectos políticos, Rose Marie Santini y Marcio Borges, investigadores del Netlab de la Universidad Federal de Río de Janeiro, apuntan a que una eventual regulación no tiene que ver con el contenido, sino “sobre la prestación de un servicio al consumidor. No tiene que ver con libertad de expresión”.
Son un grupo minoritario de cuatro millones de personas que se encuentra entre los más ricos y educados de Estados Unidos, pero al revisar sus biografías hay algo más.
También se podrá grabar una canción que se esté reproduciendo en ese momento para buscarla automáticamente, al estilo de Shazam.
El servicio de Google desea optimizar la experiencia de los usuarios con autos eléctricos. Para ello, han apuntado a las búsquedas de estaciones de carga eléctrica en el mapa.
Google, las metaplataformas y otras empresas se enfrentan a normativas similares a las impuestas a los bancos.
Antes de la “explosión” de la IA a nivel usuario que remeció al mundo hace menos de un año, el equipo de la directora senior de Google a cargo de los desarrollos de aplicaciones accesibilidad venía trabajando con esas herramientas, tanto que ahora le parecen imprescindibles. Andersson visitó Chile para participar en el lanzamiento del primer Índice Latinoamericano de IA, desarrollado por el Centro Nacional de Inteligencia Artificial (CENIA).
La nueva tecnología aplicada en los dispositivos Android permitió que la información preliminar del movimiento telúrico llegara en tiempo récord a los aparatos móviles.
Comprar en Internet puede ser un arma de doble filo, pues podemos confiar en reseñas sin saber que son falsas y adquirir un producto con el que no estaremos conformes.
El mundo digital exige más y más passwords, cada vez más complejas y difíciles de recordar. Son literalmente la llave a nuestros datos y servicios, ¿pero cómo hacer una que sea confiable pero al mismo tiempo memorizable?
