El 21 de mayo el gobierno anunció que las aguas territoriales chilenas se convertirán en santuario ballenero. Entre las especies protegidas estarán las ballenas azules que nadan frente a Ancud, donde Bárbara Galletti y Elsa Cabrera, fundadoras del Centro de Conservación Cetácea, llevan un minucioso registro fotográfico de los mamíferos más grandes del mundo y educan a la comunidad para que desarrolle el ecoturismo sin ahuyentar a las ballenas.
Medioambiente
4 jul 2008 10:09 AM