Un reciente estudio proyectó cómo la tecnología y la optimización de recursos harán que la atención hospitalaria tenga grandes modificaciones de aquí al 2040.
Francisco Corvalán
28 feb 2023 03:19 PM
Un reciente estudio proyectó cómo la tecnología y la optimización de recursos harán que la atención hospitalaria tenga grandes modificaciones de aquí al 2040.
La última glosa de la Subsecretaría de Redes Asistenciales da cuenta de un problema que por ahora no tiene solución, pero que el Minsal y otras instituciones buscan contener.
De acuerdo al informe del Centro de Políticas Públicas e Innovación en Salud (CIPS), hay 8.141 garantías retrasadas relacionadas a la etapa del diagnóstico y 3.794 a la de tratamiento. Para los expertos esta situación es grave, pues la espera para confirmar un diagnóstico o acceder a un tratamiento puede ser mortal.
Una consulta de especialidad pasó de un promedio de 557 días de espera a 399 en un año, mientras que para una cirugía disminuyó un 38% debido a diversas estrategias que se implementaron para mejorar la actividad quirúrgica. Pero la autoridad de Redes Asistenciales admite que "aún no podemos sacar cuentas alegres".
De acuerdo a una investigación de la Universidad San Sebastián, en la red pública hay quirófanos en desuso, principalmente por la falta de personal. También sostiene que una mayor eficiencia en el uso de los recursos y de la capacidad de las salas podría ayudar a resolver el grave problemas de las listas de espera.
De acuerdo a las cifras del Minsal, en 2021 había 8.098 personas esperando ser atendidas, pero este año esa cifra subió a 14.680. Los expertos advierten su gravedad, pues los tumores ya son la primera causa de muerte en el país.
De esta forma, la titular de Salud, Ximena Aguilera, aseguró que “el Presidente me ha encargado como primera prioridad el que nos avoquemos a recuperar la capacidad de producción del sector público y que tratemos de recuperar la actividad".
De acuerdo a las cifras del Minsal, en 2020 había 4.368 personas esperando ser atendidas, pero este año esa cifra subió a 7.262. Los expertos explican que el fuerte incremento se debe a la paralización de ciertas atenciones médicas por la crisis sanitaria y añaden que la situación es preocupante porque también han aumentado los decesos.
"No sirve aumentar la oferta si no se abordan los problemas para gestionar" la asistencia de los pacientes con gente capacitada en el área médica, sostiene Cristóbal Tello, director del Laboratorio de Innovación Pública de la Pontificia Universidad Católica.
Los equipos médicos trabajaron a toda su capacidad para enfrentar la crisis sanitaria, por lo que se paralizaron ciertas atenciones médicas. Esto impactó de forma directa las listas de espera. Si a finales de 2019 había 7.944 garantías GES retrasadas, ahora son 62.828. En el mismo período, el retraso en las cirugías pasó de 258 mil a 330 mil. Y los tiempos de espera también han aumentado.
El médico cirujano se plantea como partidario de la columna vertebral de lo aprobado hasta ahora en la Convención, y asegura que el modelo de un sistema universal y único es "la solución" de las listas de espera que, hoy, son las más abultadas desde que hay registro. Afirma, también, que una de las prioridades de la nueva administración es reducirlas. Por esta razón, la autoridad dice que pusieron en marcha un plan que se centra en reactivar pabellones y fortalecer la cooperación entre el sector público y privado.
El pasado martes, el pleno de la Convención aprobó la creación de un Sistema Nacional de Salud de carácter “universal, público e integrado". A partir de esta resolución surgió una duda importante: ¿Qué pasará con las listas de espera? De acuerdo a un estudio realizado por la Fundación Politopedia, estas aumentarían aún más. Los expertos también advierten que la unificación del modelo de salud traería consecuencias para todas las personas, tanto las que se atienden en la la red pública como en la privada.
El auge del e-commerce, la complejidad de la logística internacional y la dificultad para desarrollar proyectos de bodegaje explican que la disponibilidad de almacenaje se haya reducido prácticamente a cero. Todos los metros cuadrados están ocupados. Y aquellos proyectos en construcción ya tienen contratos de arriendo pactados. Las listas de espera pueden llegar hasta 2023. Y el descalce entre oferta y demanda amenaza con continuar por a lo menos un par de años más. Hoy surgen nuevas alternativas, mientras el mercado intenta reacomodarse a este nuevo auge.
Matías Goyenechea, cientista político y magíster en Salud Pública de la U. de Chile, aborda las medidas más urgentes para la cartera. Reducir los copagos de algunos cánceres, elevar la productividad de los pabellones y gestionar la lista de espera son algunas, que se suman a la administración de la pandemia. Así, reformas más estructurales, como la que pondría término a las isapres, quedarían para 2023.