Los estadounidenses estaban enterados por contrato de la dinámica festivalera, aunque recién ayer les molestó el rito de las gaviotas y los animadores. Cobraron cerca de un millón de dólares y su show en un comienzo se había conversado para 75 minutos.
La banda californiana, el número anglo de este año, tuvo un criticado paso por la Quinta Vergara. Adam Levine llegó media hora tarde, cantó rápidamente con interacción mínima con el público, y se retiró furioso.
Después de su cuestionada presentación en el Festival de Viña, el público chileno recurrió a las redes sociales del cantante para mostrar su descontento.
La banda debutó pidiendo que no la interrumpieran. Se fueron de la Quinta sin llevarse las Gaviotas. Paul Vásquez, sin arrasar y apelando a la emoción, triunfó.
En un registro tras su presentación sobre la Quinta Vergara, se puede observar al frontman de Maroon 5, algo enojado, conversando con alguien de su equipo. Sus quejas, principalmente, apuntaban a la duración del show y su transmisión en vivo.
Tocaron tarde, se saltaron los premios y brindaron un concierto breve. No hicieron mucho mérito por la noche anglo. Viña les importó un carajo.
La banda californiana tuvo su debut en la Quinta Vergara con una presentación que repasó sus grandes éxitos, con contadas interacciones con el público y que generó distintas críticas por redes sociales debido a la poca energía de su vocalista.
Una de las críticas que suele repetirse en algunas presentaciones de los hombres de "Sugar", es que suelen ser fríos en escena, ¿es tan así?
Una de las canciones más emblemáticas de la banda norteamericana –con más de 900 millones de reproducciones en Spotify– parecía ser inspirada por la historia de amor entre Adam Levine y su reciente matrimonio. Sin embargo, fue escrita por otro músico que se la cedió al grupo porque su disco fue cancelado.
La banda, que debuta esta noche, pactó con la organización del Festival de Viña hacer su espectáculo completo, como si fuera uno de sus recitales, sin recibir frente al público los tradicionales galardones.
Lanzada el 2002, "This Love" tardó dos años en volverse un hit y le puso fin a una serie de intentos por encontrar un estilo propio y hacer carrera en la música. La banda de Adam Levine existía desde mitad de los noventa, aunque con otro nombre y otro sonido.
"Somos los Hall and Oates del nuevo milenio", dijo el vocalista Adam Levine a Rolling Stone hace ya 16 años, en medio de la gira de promoción de su debut Songs about Jane. Aunque su éxito no fue instantáneo, el funk blanco con trazas de AOR en singles como "This love", "She will be loved" y "Sunday morning" terminó por alcanzar cuádruple platino.
Adam Levine, quien anoche aterrizó en Viña para actuar esta noche en la Quinta Vergara, es el líder, músculo y el único integrante identificable que tiene el conjunto californiano. Una estrella a medio camino entre el creador musical, la figura televisiva y el modelo publicitario, de inclinación demócrata y sensibilidad progresista pero más de algún tropiezo mediático.
La imagen de la banda, especialmente de Adam Levine, ha tenido sus altibajos. En ocasiones la apariencia del cantante ha sido alabada por los medios, en otras se ha cuestionado el trasfondo como en el caso del Super Bowl 2019.
El nombre de la banda californiana se le ocurrió a su frontman Adam Levine, quien aseguró en entrevista con David Letterman que nace de una "historia horrenda".
