Bandas de colombianos instaladas en Chile envían cocaína al extranjero en innovadores camuflajes, que van desde motores a piezas de ajedrez. La demanda local consiste en importar drogas sintéticas como éxtasis, que es ingresado al país desde Europa con una red de "burreros" reclutados por organizaciones narcos en fiestas electrónicas. Según la PDI, de un kilo de esta droga que se manufactura en laboratorios clandestinos se pueden llegar a obtener hasta $30 millones de pesos.
2 jun 2023 08:58 PM