La portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, Maria Zajarova, aludió a las palabras del Pontífice en las que aseguró que los “más crueles” en el marco de la guerra en Ucrania son los “chechenos y los buriatos”, aludiendo a aquellos que viven en Rusia pero no tienen una tradición rusa.
Hicieron una segunda parada para repartir víveres en la ciudad de Zaporiyia, donde está la central nuclear más grande de Europa, situada en el sur de Ucrania, cuando fueron tiroteados.
El pontífice precisó que “no excluyo el diálogo con ninguna potencia, que esté en guerra, aunque sea el agresor”.
El Pontífice efectuó las declaraciones en una entrevista con la cadena CNN Portugal con motivo del encuentro de jóvenes que se celebrará en 2023 en Lisboa.
“Quiero decirles cuánto lo siento”, lamentó el pontífice en su último encuentro en su viaje de cinco días a Canadá, ante una multitud en Iqaluit, el territorio de los Inuit en el Círculo Polar. “Les agradezco por haber tenido el coraje de contar sus historias y compartir su gran sufrimiento que no podía imaginar”, afirmó.
Aunque lo que más quieren es tiempo libre y algo de descanso, los padres no son tan sofisticados ni exigentes para pedir obsequios en su día, el domingo 19 de junio. Al menos los ocho progenitores aquí consultados se conforman con placeres más bien simples y primarios.
De una orden evangelizadora, pasando por acusaciones de abusos a niños y el arribo de un Papa. Esta es la historia de una de las órdenes más longevas del catolicismo.
Se trata de la investigación que el diario “El País” entregó durante el viaje del Papa a Chipre y Grecia y que recoge los centenares de atropellos a menores en el seno de entidades religiosas de esa nación, según reveló el portavoz de la Santa Sede, Matteo Bruni. Al respecto señaló que el pontífice “siempre ha insistido en su atención y su cercanía a las víctimas de abuso, con las palabras, la oración y con muchos gestos”.
Se trata de la segunda visita de un sumo pontífice a Chipre, una isla poblada especialmente por cristianos ortodoxos, tras la realizada por Benedicto XVI en 2010. Francisco, que el sábado acudirá a Grecia, trasladará con él a Italia a 50 migrantes, según indicó el presidente chipriota Nicos Anastasiades, en un anuncio no confirmado por ahora por el Vaticano. “Su simbólica iniciativa es, ante todo, una señal fuerte de la necesidad de la revisión de la política migratoria de la UE”, dijo Anastasiades.
La Iglesia Católica ha sostenido durante siglos que la ciencia y la fe no son enemigos jurados, sino formas diferentes de conocimiento que se complementan. Ese entendimiento guía las investigaciones de supuestos milagros, que son emprendidas por la Congregación para las Causas de los Santos del Vaticano, que tiene alrededor de dos docenas de empleados y más de 100 miembros clérigos y consejeros.
“Tanto mis antecesores como yo mismo hemos pedido perdón por los pecados personales y sociales, por todas las acciones u omisiones que no contribuyeron a la evangelización”, dijo el pontífice en el mensaje leído durante la conferencia diaria del presidente azteca, Andrés Manuel López Obrador. En reiteradas ocasiones, el mandatario había pedido al gobierno de España y al Vaticano que ofrecieran disculpas por los abusos cometidos durante la conquista en México.
“Nosotros, los obispos católicos de Canadá, expresamos nuestro profundo remordimiento y ofrecemos una disculpa inequívoca”, dijeron desde la cúpula de la iglesia canadiense. Sin embargo, muchos grupos autóctonos esperan otro gesto simbólico, esta vez del pontífice, de quien han pedido repetidamente una disculpa presencial en Canadá. Francisco recibirá a una delegación indígena en diciembre.
La máxima autoridad de la Iglesia Católica señaló este miércoles que la inoculación masiva será la única manera de poner fin a la pandemia.
