Conviene advertir que la propuesta de algunos académicos y candidatos de eliminar el TC surge de razonamientos asociados a su denunciada politización y mala fama. Parece sensato, más allá de estas críticas, asumir que la función constitucional inexorablemente supone interpretar conceptos -como el bien común, dignidad y derechos- cuyo alcance depende de presupuestos filosófico-políticos, lo cual es una característica propia de toda corte constitucional en el mundo.
Soledad Bertelsen, Claudio Alvarado, Ignacio Covarrubias, Matías Petersen y Jorge Hagedorn
7 may 2021 07:15 PM