Los cuellos de botella en Asia y el desafío de impulsar la producción de los chips de computadores más básicos del sector automotriz podrían prolongar la crisis de partes hasta 2022.
Mike Colias de The Wall Street Journal
1 oct 2021 11:56 AM
Los cuellos de botella en Asia y el desafío de impulsar la producción de los chips de computadores más básicos del sector automotriz podrían prolongar la crisis de partes hasta 2022.
La escasez de carbón y los esfuerzos para controlar el consumo de energía dificultan el funcionamiento de las fábricas chinas. Durante la semana pasada, las autoridades locales obligaron a las fábricas en las provincias de Guangdong y Jiangsu a reducir las horas de operación o cerrar temporalmente, ya que los funcionarios están intentando controlar el uso de energía.
Medida de algunos fabricantes apunta a priorizar los microprocesadores en los modelos de mayor volumen y así poder entregar vehículos nuevos.
El conglomerado con sede en Suwon ha experimentado un auge en la demanda de computadoras, electrodomésticos y servicios en la nube desde el hogar.
En un informe entregado este viernes, el gigante asiático entrego una ambiciosa hoja de ruta que busca no depender de occidente para el desarrollo de nuevas tecnologías.
“Si la noticia es correcta, consideraríamos la reducción como algo negativo”, escribieron analistas de Citigroup.
La venta pone a un proveedor básico para Apple y otros grandes fabricantes de la industria bajo el control de un solo operador, Nvidia, y probablemente se enfrente a obstáculos por parte de los reguladores.
EL monto de la operación se calcula en unos US$ 40.000 millones.