A siete días de asumir, ya se notan los roces entre las dos coaliciones que sustentan el gobierno de Boric. “La relación de confianza aún no se ha construido, tomará tiempo y quizás nunca termine de cuajar”, diagnostica de entrada un dirigente del Socialismo Democrático, aludiendo a sus socios de Apruebo Dignidad.
La designación de autoridades regionales es la nueva tarea que viene para el futuro gobierno de Gabriel Boric. Los parlamentarios están atentos, porque no quieren ceder espacio en esa decisión.
Los presidentes del PS y el PPD reiteraron que no hubo una negociación ni exigieron cargos en el futuro gobierno y que su disposición es colaborar para que al gobierno le vaya bien.
Ayer, el presidente electo se reunió con los timoneles del PPD y el PL, aunque no abordó la posible integración de sus militantes en cargos de gobierno. Pese a ello, y cuando el PS ya tendría asegurada su incorporación al gabinete, en el sector exploran un diseño para relacionarse con la futura administración, más allá de los nombramientos que haga el diputado por Magallanes. Hoy, en tanto, Boric tiene prevista una reunión con los radicales.
En el PPD no cayó bien que el presidente electo hiciera diferencias con su colectividad y, en vez de recibirlos personalmente como lo hizo con el PS la semana pasada, le pidiera a Giorgio Jackson entablar una conversación con ellos de cara a la instalación del gobierno. La molestia se da en momentos en que el diseño que se está imponiendo en Apruebo Dignidad contempla en una primera línea del gabinete ministerial solo a los socialistas y no al resto de los partidos del denominado "socialismo democrático".
Directivas PS, PPD, PR y PL se reunieron este lunes y acordaron organizar un encuentro para proyectar una alianza, esta vez sin la Democracia Cristiana. Cita se concretaría a principios de enero y también tiene como objetivo delinear las bajadas que le darán sustento a la "colaboración constructiva" que han comprometido con el presidente electo. Todo esto, independiente de si el frenteamplista los invita o no a formar coalición.
